Los industriales del aceite de oliva alertaron hoy de la subida continuada de precios en origen que esta experimentado este producto en las últimas semanas, inexplicable ante la previsión de cosecha esperada, fijada por la Agencia del Aceite de Oliva en unas 1.200.000 toneladas aproximadamente, y peligroso, ya que puede provoca un nuevo descenso en el consumo.

El presidente de la Asociación Nacional de Envasadores y Refinadores de Aceites Comestibles (Anierac), Pedro Rubio, explicó que los precios mantienen una tendencia al alza, sin motivo, lo que está dificultando las compras.

A su juicio, esta tendencia es un gran error, ya que el consumo resentido desde la campaña anterior por la fuerte subida de precios, no ha llegado a recuperarse y el sector podría encontrarse con una "bofetada más gorda" que la del año anterior.

Matizó además que la subida detectada en origen (se realizan operaciones a 2,7 euros por kilo para el lampante de cara al verano), aún no se ha trasladado al consumidor, pero que sería imposible no hacerlo de seguir el incremento en origen.

Rubio recuerda que la campaña es muy superior a la anterior, que a su vez tampoco fue tan escasa como se preveía (827.000 toneladas finalmente), con unos "stocks" finales de 200.000 toneladas.

Según los datos de la Agencia, a final de enero, la producción en esta campaña ascendía ya a 829.500 toneladas, un 28,4 por ciento más que la última campaña y del 3,6 por ciento con respecto a la media de las cuatro últimas campañas.

Las existencias se situaban a 31 de enero en 779.100 toneladas, de las que 672.600 toneladas se encuentran en poder de las almazaras y el resto en manos de envasadores.

Las previsiones por tanto apuntan, a falta de dos meses, a una producción de casi 1,2 millones de toneladas, "volumen suficiente para atender las necesidades del mercado interior y exterior y mantener precios estables".

Necesidad de promoción para un producto emblemático

Rubio también se refirió a la necesidad de promocionar el aceite de oliva entre los restauradores y hosteleros, como pieza fundamental de divulgación de sus cualidades y el fomento de su consumo, y sin olvidar que el aceite de oliva no es el más empleado en el canal restauración, reino absoluto del girasol.

Aseguró que el aceite es quizás lo más emblemático de la gastronomía española, el eje esencial y el más emblemático de nuestros platos, y dado el éxito actual e internacional de nuestra cocina y nuestros cocineros, se impone aprovechar esta oportunidad.

Para ello, la Asociación firmará en breve un convenio de colaboración con la Federación de Hostelería, avalado por los ministerios de Industria y Agricultura, para poner en marcha esta iniciativa.

Se trata de formar e informar a los propios restauradores de las ventajas de utilizar este tipo de aceite, con el fin de que inculcarlas a sus clientes.