El fútbol español está conmocionado tras la brutal agresión a Juande Ramos, entrenador del Sevilla.

Juande se ha recuperado, pero la indignación y la rabia recorre todos los estamentos.

El Comité de Competición decidirá mañana, viernes, las sanciones por los incidentes ocurridos en el partido de Copa del Rey entre el Betis y el Sevilla, suspendido en el minuto 57.

El plazo de alegaciones para esta ronda de vuelta de cuartos de final de la Copa del Rey expira el viernes a las 18 horas y será a partir de ese momento cuando el Comité de Competición haga públicas sus decisiones, tanto de este partido como de los otros tres encuentros disputados.

El presidente Alfredo Flórez, por parte de la RFEF, el vocal Enrique Arnaldo, en representación de la Liga de Fútbol Profesional (LFP), y el también vocal Miguel Cardenal, consensuado por los dos organismos, son los tres miembros del Comité de Competición.

El Secretario de Estado para el Deporte, Jaime Lizzavetzky, reclamó el miércoles "más cordura y menos testosterona", en clara alusión a los dirigentes del Betis y del Sevilla, que durante dos semanas se dedicaron a atizar la hoguera de la discordia.

Al final, un descerebrado, presuntamente borracho, según varios testigos, lanzó una botella que impactó en la cabeza de Juande. El entrenador sevillista perdió el conocimiento y el partido tuvo que ser suspendido.

Pero también se vieron bengalas en el estadio y el ambiente estuvo caldeado desde el principio: hasta los jugadores se dieron más patadas de la cuenta.

Máximo rigor

Este caso no va a quedar impune: la Comisión Antiviolencia se va a reunir el viernes de urgencia, según anunció anoche Lizzavetzky.

"Me he puesto en contacto con el ministerio del Interior para convocar una reunión urgente de la Comisión Antiviolencia".

"Hay que actuar con el máximo rigor, tanto por parte de la FEF como de la Comisión Antiviolencia y, desde luego, desde el Gobierno", añadió Lizzvetzky.

Además esta tarde el Comité de Competición de la Federación Española de fútbol para tratar estos graves incidentes.

El Betis sabe que se enfrenta a una sanción ejemplar.

Los verdiblancos pueden recibir una sanción muy grave o grave.

En el primer caso, el partido no se reanudaría y el campo será podría ser clausurado entre 4 y 12 partidos.

En el segundo caso, la sanción grave, el partido podría reanudarse y el Ruiz de Lopera, será cerrado entre 1 y 3 partidos: no olvidemos que el Betis es reincidente.