La selección española de balonmano dio un gran paso para clasificarse para las semifinales del Europeo de Dinamarca después de derrotar con muchos apuros (27-28) a Austria, una de las sorpresas de esta Eurocopa, en su segundo compromiso de la segunda fase de grupos del torneo. Con un punto ante Macedonia, el próximo rival, lo lograría.

Un triunfo importante, acuñado con más apuros de los previstos en la segunda parte tras un primer tiempo extraño en el que durante una veintena de minutos dejó de funcionar tanto el ataque como la defensa de los Hispanos. Los españoles, que sí funcionaron en los lanzamientos de siete metros, se desconectaron. Reaccionaron, retomaron las riendas, recuperaron el olfato delante y, lo justo, detrás y labró un 12-14 a su favor al descanso. Pero los campeones del mundo no terminan de despejar las dudas que alimentan.

España sobrevivió a esa rara primera parte y esa fue la mejor noticia. En el debut en el torneo del pivote Julen Aginagalde, que se recuperó de una lesión, los Hispanos esbozaron de inicio lo que parecía una victoria cómoda. No tardó mucho el irundarra en demostrar que es el mejor pivote del panorama actual (firmaría seis goles en la primera media hora). Pero los hombres de Manolo Cadenas se atascaron en el ataque, estuvieron más de cinco minutos sin ver puerta y Austria, que aderezó el bajón aprovechándose de hasta nueve pérdidas de posesión rivales, comprimió el partido y lideró el marcador nunca más allá de los dos goles de margen.

Tras el descanso llegó la mejoría de los Hispanos, mostrando un repertorio mucho más amplio en ataque y recuperando sus bríos defensivos. Ningún exceso, eso sí. Y Austria, fundamentalmente espoleada por un eléctrico Viktor Szilagyi y por su solidaridad atrás, se acercó a dos goles en varios momentos. La incertidumbre en el marcador que alimentó Austria estuvo potenciada por algún error en el lanzamiento, alguna parada oportuna de Bauer y la postrera exclusión de Gedeón Guardiola. A menos de 30 segundos Austria se acercaba a un gol (27-28) y España marraba una posesión y un tiro para dejar abierta la opción del empate a falta de diez segundos.

"Igual no pensábamos sufrir tanto y por eso hemos sufrido, pero después del ambiente espectacular en el que jugamos contra Dinamarca, de la tensión, llegas hoy y, pese a que el partido es más importante, cuesta mantener ese mismo nivel de intensidad", señaló el seleccionador Manolo Cadenas. "Los árbitros han permitido demasiado y eso ha sido clave para que su defensa se fuera afianzando, por lo que en el próximo partido nosotros tendremos que hacer más faltas también, más cuando las faltas duras se premian con pasivo para el rival. Ante Macedonia tenemos que ser más sólidos que hoy en defensa y estar más sueltos si queremos ganar", añadió.

27 - Austria (12+15): Marinovic; Weber (5, 1p), Ziura (-), Szilagyi (5), Schlinger (2), Santos (3) y Posch (-) -equipo inicial- Bauer (ps), Edelmuller (-), Hermann (5), Schmid (6), Bozovic (-), Woss (-), Wilczyinski (-), Wagesreiter (1) y Kolar (-).

28 - España (14+14): Pérez de Vargas; Víctor Tomás (2), Maqueda (4), Gedeón Guardiola (1), Morros (1), Cañellas (7, 5p) y Ugalde (-) -equipo inicial- Sierra (ps), Gurbindo (1), Rocas (-), Raúl Entrerríos (-), Sarmiento (-), Aginagalde (8), Andreu (-), Antonio García (-) y Rivera (4).

Marcador cada cinco minutos: 1-3, 3-5, 7-8, 11-10, 12-11 y 12-14 (Descanso) 15-17, 16-19, 18-22, 23-25, 25-27 y 27-28 (Final).

Árbitros: Gousko y Repkin (BLR). Excluyeron por dos minutos Ziura, Szilagyi, Schlinger y Posch por Austria; y a Víctor Tomás y Gedeón Guardiola por España.

Incidencias: Encuentro correspondiente a la segunda jornada del Grupo I de la segunda fase del Campeonato de Europa de Balonmano de Dinamarca 2014 disputado en el Jyske Bank Boxen de Herning ante unos 11.000 espectadores.EFE