El goteo de informaciones extraídas de los correos electrónicos de Miguel Blesa, que fue hasta 2009 presidente de Caja Madrid, sigue dibujando un panorama de presuntos tratos de favor, mediaciones y luchas por el poder (con la participación directa de miembros de la Ejecutiva del PP) en el seno de la caja hoy nacionalizada. Este jueves El País publica nuevos emails en los que el banquero —que pasó fugazmente por prisión hace unos meses— lidia con los intereses de los barones populares así como actúa de mediador en diferentes negocios de cariz personal.

"Es la enésima vez que Nacho González y la rubia [Esperanza Aguirre] se llevan un revolcón". Así de eufórico se muestra, en octubre de 2009, Matías Amat, director general de Caja Madrid, en un correo electrónico dirigido a Blesa. 2009 fue el último año de este como presidente de la caja madrileña, y en aquel momento las luchas intestinas por el poder dentro de la misma eran vox populi.

"Prudentes, pero es un triunfo", le contestó en aquella ocasión Blesa a su segundo. Finalmente, esa "batalla", como escribe otro colaborador del presidente, "ese bofetón", se ganó, y con él la guerra. Su sillón en Caja Madrid lo ocuparía Rodrigo Rato, afín al ala rajoyista del partido, con lo que las bazas de Aguirre, por entonces presidenta madrileña, quedaron completamente descartadas.

Otro de los correos que este jueves publica el referido diario, está relacionado con lo que se llamó la guerra por los derechos del fútbol. Según El País, la propia Esperanza Aguirre escribió un sms a Blesa para que estuviera al tanto de un tema del que le iba a hablar Ignacio González —entonces número dos de Aguirre en Madrid— para que "le hiciese caso".

El asunto en cuestión era el interés de Aguirre porque Caja Madrid inyectara dinero en Telemadrid para que así la cadena pública de televisión pudiera comprar los derechos de retransmisión del Real Madrid. Finalmente esa oferta —que el periódico cifra en 120 millones de euros— no salió ganadora, y fue Mediapro quien se adjudicó los derechos televisivos del equipo blanco.

Desde que el pasado día 11 de diciembre eldiario.es sacara a la luz la primera remensa de correos de Blesa, las informaciones sobre el expresidente de la caja más grande del país se han sucedido a una velocidad de vértigo. Primero fueron sus sarcásticas opiniones sobre las controvertidas participaciones preferentes, luego vinieron los presuntos tratos de favor a familiares (una sobrina) y políticos de distintos partidos (PSOE y UCD), las tarjetas de crédito 'en negro' y posteriormente las revelaciones sobre "la tristeza" de José María Aznar porque Caja Madrid no acometía un proyecto de su interés.

La última de estas informaciones hasta el momento tienen como protagonista al hijo del expresidente del Gobierno del PP. Según publicaba este martes El País, Blesa le remitió a Aznar junior dos misteriosos mensajes sms el 16 y el 17 de julio de 2009 en los que da a entender que el hijo del exmandatario le estaba presionando para que Caja Madrid comprara unos cuadros del pintor Gerardo Rueda, íntimo amigo de Aznar, y fallecido en 1996.