El consejero de Educación, Cultura y Deporte, Luciano Alonso, ha abogado ante el Consejo de la Unión Europea por facilitar el acceso de las industrias de la cultura a la financiación, así como por favorecer el desarrollo de las aptitudes del capital humano y el impulso de un entorno empresarial favorable a la creación y la innovación. Alonso ha participado este martes en la reunión del Consejo de ministros de Cultura, en Bruselas, como representante de las comunidades autónomas españolas.

Alonso, según se indica en nota de prensa, ha subrayado en su intervención que hay que proteger y estimular a las industrias creativas y Pymes de sector audiovisual, "para que puedan competir ofreciendo sus particularidades a un mercado global que corre el riesgo de acabar en manos de grandes monopolios que homogeneizan los contenidos y las prácticas de consumo".

Este nuevo contexto requiere, ha agregado, "una reflexión en profundidad sobre el marco normativo, tanto en el plano de los Estados como en el de las propias directivas europeas. La convergencia digital modifica enfoques y hace necesaria una actualización y adaptación".

Por otro lado, el consejero ha advertido en su discurso, consensuado con las comunidades autónomas, que los nuevos servicios, dispositivos y contenidos culturales "no penetran por igual en todos los territorios". Por ello se hace necesario, según Alonso, "desarrollar iniciativas para la difusión de productos culturales digitales no habituales o con dificultades de acceso a los circuitos comerciales de exhibición o emisión".

De esta forma, el consejero ha destacado que "son vitales las políticas que cierren la brecha digital para universalizar el acceso a la cultura del conjunto de la población". En este sentido, ha añadido que la formación dirigida a paliar estas diferencias es transcendental, "porque influye en la igualdad de oportunidades de las personas y en las competitividad de la economía".

Alonso ha reivindicado así la regulación de la protección de grupos específicos, como los menores o discapacitados, y el desarrollo de estrategias de inclusión social que tengan en cuenta las condiciones particulares de estas minorías.

Doble dimensión de la cultura

El consejero ha defendido la doble dimensión de la cultura, como generadora de riqueza y empleo, y como valor en sí misma. Igualmente, ha resaltado que "en esta encrucijada de crisis económica es cuando las políticas culturales tienen un papel importante, como lugar en el que se reformulan los vínculos entre tecnología, economía, sociedad y política".

Alonso ha concluido con una llamada al Consejo de Europa para que "doten a la cultura de ese papel armonizador que permita construir un marco en el que la convergencia genere riqueza y empleo, pero sin dejar atrás, en línea con la Carta de Derechos Fundamentales de la UE, aquellos valores que hacen crecer y mejorar a las sociedades de forma individual y colectiva".