Casi 900 mujeres de Galicia cuentan con medidas de protección a causa de un problema de violencia de género, una cifra superior a las que disponían de estas medidas en el mismo nivel del año 2012. Las denuncias por esta cuestión, no obstante, se mantienen en términos generales y alcanzaron las 2.552 en el primer semestre aún a pesar de la crisis económica que "afecta" a las mujeres que desean emprender una vida lejos de sus maltratadores.

Según los datos del Punto de Coordinación de Medidas de Protección de la Xunta, a noviembre había concedidas en Galicia 884 medidas de protección, de las que 353 corresponden a Pontevedra, 345 a A Coruña, 129 a Lugo y 57 a Ourense.

Al mismo tiempo, el Consejo General del Poder Judicial tiene contabilizadas 2.552 denuncias por malos tratos hacia la mujer en el primer semestre del año, de las que 1.185 fueron en Pontevedra, 885 en A Coruña, 250 en Lugo y 232 en Ourense.

A pesar de que las cifras se mantienen en términos generales, la crisis "está afectando en mayor medida a las mujeres víctimas de violencia de género", según ha explicado la secretaria xeral de Igualdade, Susana López Abella, a Europa Press.

"Tenemos datos y estudios que nos dicen que, efectivamente, la crisis está afectando", ha explicado la secretaria xeral, quien ha recordado que en la situación actual de paro hay muchas mujeres maltratadas que "dependen económicamente de su agresor" y, al mismo tiempo, "tiene hijos", por lo que "dar el paso es más complicado".

Sin embargo, Susana López Abella, ha querido recordar a estas víctimas que "hay medios" para salir de su situación, y ha apostado por las ayudas económicas que la Xunta concede a las mujeres que han sufrido violencia de género, que mantendrán su cuantía en 2014.

En el penúltimo mes del año 2013 son 226 las mujeres víctimas de violencia de género que están recibiendo alguna de las ayudas que tiene en marcha la Xunta, tanto la ayuda periódica como la ayuda de pago único o de indemnización. Tras realizar una ampliación de crédito para las ayudas periódicas esta semana, la Xunta realizará una ampliación de las ayudas de pago único el próximo lunes, ha anunciado.

"violencia económica"

Con motivo de la conmemoración este lunes del Día Internacional para la Eliminación de la Violencia de Género, los sindicatos en Galicia han convocado concentraciones en diferentes ciudades en las que han querido hacer hincapié en la situación económica actual y la existencia de una "violencia económica" para las mujeres víctimas de malos tratos.

En este sentido, la secretaria confederal de CIG-Muller, Margarida Corral, ha denunciado la "constante reducción" de los recursos para la aplicación efectiva tanto de la ley gallega como de la ley integral de medidas contra la violencia de género.

Al mismo tiempo, ha hecho hincapié en la existencia de una "violencia económica" que "se traduce en dificultades para las mujeres en acceder a un empleo, tener un contrato, un ascenso o estabilidad en el puesto de trabajo".

También CC.OO. y UGT consideran que la crisis está "empeorando las condiciones y poniendo trabas para que las víctimas de violencia machista acudan a la justicia". En esta línea, sus responsables han admitido que un 12 por ciento de las denuncias interpuestas el pasado año en España fueron finalmente retiradas, algo que atribuyen a la situación económica.

Tanto CC.OO. como UGT consideran que la independencia económica es "clave" para salir del "abismo de la violencia", por lo que han reclamado a la Xunta el desarrollo de un "programa de acción específico de inserción sociolaboral para víctimas".

Derecho al aborto

La Marcha Mundial das Mulleres, que ha convocado una manifestación este lunes a las 20.00 horas en Vigo, reclama en su campaña de este año un cuerpo femenino "libre de agresiones" y de "imposiciones".

En este sentido, además de la violencia que se ejerce contra las mujeres, las integrantes de la MMM critican el "recorte del derecho a la interrupción voluntaria del embarazo", que también mencionan los sindicatos, y que "convierte a la maternidad en un mandato cultural y no en una elección libre".

Diferentes tipos de entidades sociales, ayuntamientos e instituciones han convocado diferentes actos este lunes en los que recordarán a las víctimas de la violencia de género —que se ha cobrado dos vidas este año en Galicia— y reclamarán un mayor rechazo social.

Más coordinación

La Xunta de Galicia apuesta de cara al futuro por trabajar en protocolos de actuación que permitan la "máxima coordinación" con los ayuntamientos, a través de la Fegamp, para atender de la manera más cercana posible a las víctimas.

Susana López Abella ha señalado a Europa Press que ya son 144 los ayuntamientos adscritos a la Red de Municipios contra la Violencia de Género y que, por tanto, cuentan con un equipo de psicóloga y abogada para asesorar a las mujeres que pidan ayuda.

La Xunta de Galicia cuenta además con un servicio jurídico online que recibe "todo tipo de consultas" y que es atendido por letradas, así como los servicios adscritos al teléfono de la mujer, que no deja rastro en la factura.

Trata de mujeres

Un capítulo específico de la violencia ejercida contra las mujeres corresponde a las víctimas de trata con fines de explotación sexual. La Xunta de Galicia, en el marco de un trabajo europeo, colabora con las fuerzas de seguridad en la concienciación para evitar que se produzcan este tipo de casos.

Sobre esta cuestión, López Abella ha elogiado la labor "impresionante" de los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado, que "están destapando la auténtica esclavitud del siglo XXI". "Es uno de los mayores problemas a nivel europeo y sabemos que todas las instituciones están muy involucradas y trabajando en este ámbito", ha explicado la secretaria xeral.

Tras el trabajo realizado en colaboración con Portugal y Brasil dentro del proyecto 'Itíneris' de prevención de la trata con mujeres brasileñas, cuyas conclusiones se están redactando, de cara al próximo año se busca trabajar con la situación de las mujeres rumanas que están siendo explotadas sexualmente en Galicia. En algunos casos se trata también de menores, como el caso de la niña liberada de un club de alterne de Padrón (A Coruña) hace pocas semanas.