Confirman la condena a dos jóvenes por violar a una menor "entre el jolgorio" de los amigos

  • El Supremo ratifica la pena de cuatro años de prisión para los dos acusados.
  • Los hechos ocurrieron en noviembre de 2004 en el municipio sevillano de Utrera.
  • Le quemaron casi toda la ropa y le tiraron los zapatos a un charco.
Un detalle de la fachada del Tribunal Supremo, en Madrid
Un detalle de la fachada del Tribunal Supremo, en Madrid
ATLAS
Un detalle de la fachada del Tribunal Supremo, en Madrid

El Tribunal Supremo ha confirmado la condena de cuatro años de cárcel impuesta a dos jóvenes por violar en Utrera (Sevilla) a una menor de 17 años, a la que quemaron su ropa interior "entre el jolgorio" de sus amigos, que "hacían comentarios" sobre lo que estaban viendo "sin ser conscientes" de que, "si bien al inicio" la menor había realizado una felación "de modo consentido" a uno de los acusados, "con posterioridad mostraba signos de oposición a los juegos sexuales que se le demandaban".

En un auto, la Sala de lo Penal rechaza los recursos de los dos condenados contra la sentencia de la Sección Tercera de la Audiencia que condenó a José Antonio G.R. y a Enrique C.G. por un delito de agresión sexual con la atenuante muy cualificada de dilaciones indebidas a cuatro años de cárcel y al pago de una indemnización de 10.000 euros por los daños morales sufridos por la menor, frente a la petición de la Fiscalía de 15 años de prisión y 20.000 euros de indemnización.

Los hechos ocurrieron el 7 de noviembre de 2004, cuando la entonces menor salió a dar una vuelta y se dirigió a una explanada ubicada en la parte trasera de un centro comercial montada en un vehículo junto a dos de los procesados y otros dos menores de edad.

Una vez fuera del coche, la menor realizó una felación de manera voluntaria a José Antonio G.R.. A continuación, "y como tenían conocimiento de que en dicho lugar" se encontraba la víctima, "a la que conocían porque accedía fácilmente a la práctica de relaciones sexuales con otros", se dirigieron hacia allí los otros tres procesados.

"Atemorizada"

Una vez que comenzó la violación, el resto de acusados observaba la escena con "jolgorio" aunque "sin ser conscientes" de que la menor no quería realizar dichos "juegos sexuales", por lo que "no la auxiliaron porque pensaron que eran juegos consentidos por todos, incluida la menor". Una vez concluidos estos hechos, la víctima reclamó sus ropas a Enrique, "quien le manifestó que si quería que se las devolviera 'tenía que hacerlo con él o si no se tenía que volver en cueros a su casa'".

"Al sentirse atemorizada y amenazada", la menor accedió a ello, entregándole el condenado sus pantalones. Con posterioridad, algunos jóvenes no identificados le echaron pasto sobre la cabeza y le tiraron sus zapatos a un charco, mientras que otro le prendió fuego a su ropa interior, marchándose a continuación y dejándola sola en el descampado.

El Supremo entiende que, para dictar la sentencia, la Audiencia Provincial "contó con prueba de cargo suficiente", como es "primordialmente" la declaración de la víctima, quien relató que, "con excepción de la primera felación voluntariamente realizada, los restantes actos de carácter sexual los realizó atemorizada por las circunstancias concurrentes y en contra de sus deseos".

Mostrar comentarios

Códigos Descuento