Un avión de Iberia con destino Madrid se ha visto obligado a volver a Gran Canaria tras sufrir un problema con el tren de aterrizaje durante el despegue, según han explicado a Europa Press varios de los pasajeros.

El vuelo en concreto ha sido el IB3925 de las 11.15 horas de este lunes. El avión llegó a despegar sin aparentes problemas pero a los pocos minutos el piloto informó de que la trampilla del tren de aterrizaje había quedado bloqueada impidiendo a este ser recogido.

Por ello, el avión no iba a contar con combustible suficiente para llegar a destino y se vio obligado a volver al Aeropuerto de Gando para recibir asistencia técnica inmediata.

Tras unos 30 minutos de revisión y quedar resuelto el problema que finalmente tenía que ver con los sensores del tren de aterrizaje, el piloto dio el visto bueno y en torno a las 12.50 horas el vuelo de Iberia ya anunciaba que tomaba pista para el nuevo despegue.

El avión afectado llegó finalmente a Madrid pasadas las 15.50 horas de este lunes (tras un vuelo de 3 horas), sin problemas adicionales. Eso sí, muchos pasajeros se han visto afectados perdiendo vuelos de conexión a otros destinos peninsulares, como Pamplona, Valencia o La Coruña.

Un "último susto"

A la llegada, personal de Iberia intentaba al menos trasladar rápidamente a aquellos con destinos cuyos aviones aún no habían partido, destacando algunas conexiones internacionales como Marsella o París.

La aproximación a Barajas se realizó entre algunas turbulencias e incluso varios pasajeros relataron un "último susto" segundos antes de tocar tierra, cuando el avión sufrió un fuerte vaivén lateral que hizo que el piloto aumentara potencia para enderezar el aeroplano y terminar de aterrizar de manera ya perfecta.