La consejera de Enseñanza, Irene Rigau, ha advertido este jueves de que la Generalitat "no tendrá mucha prisa" en aplicar la LOMCE cuando se apruebe porque la ley "nace con fecha de caducidad", puesto que nueve grupos parlamentarios ya han acordado cambiarla cuando el PP pierda su mayoría.

En declaraciones a Catalunya Ràdio, la consejera ha reiterado su intención de llevar ante el Tribunal Constitucional la ley de reforma educativa impulsada por el ministro José Ignacio Wert.

Rigau ha dicho que aplicar la normativa cuando se apruebe "podría dar una incertidumbre brutal" al sistema y que "hay que ser prudentes" porque, ha reiterado, nueve grupos parlamentarios ya firmaron para cambiar la Ley Wert cuando el Partido Popular ya no tenga mayoría absoluta.

La consellera ha dicho que "no espera el milagro" de que se pare la ley, que se prevé que este jueves sea aprobada en el Congreso de los Diputados, y ha reiterado que llevará la ley al Constitucional porque es "una ley sectorial, que quiere modificar el propio Estatut".

"Wert habla como si toda España tuviera una misma situación, cuando es muy diversa", ha dicho, y ha reclamado que la solución no es cambiar toda la ley: "en Cataluña la tasa de repetición es bajísima y la FP tiene más prestigio que nunca".

En cualquier caso, la ley para la mejora educativa es una "mala noticia para el sistema educativo", porque "no hace honor a su nombre de mejora, sino que busca españolizar", ha lamentado Rigau en el Parlamento catalán.

Es por ello que, "en setiembre, los centros en Cataluña deben lógicamente aplicar la normativa de la Generalitat, y el Govern estudiará atentamente cuál es el contenido de la ley, hará el recurso pertinente y actuará en consecuencia. (...) No hablo de insumisión, sino de un trato muy ajustado de la normativa", ha explicado.

En su opinión, defender el modelo lingüístico corresponde al Govern, que cuenta con el apoyo de la comunidad educativa. "Es un ataque al Estado plurilingüístico y a las competencias compartidas. Recentraliza el contenido educativo, deja el catalán fuera de las materias troncales y plantea una opción para la Formación Profesional que no ayuda al objetivo de mejora. Y es una ofensiva en toda regla para relegar las lenguas como el catalán y para poder actuar en contra de la inmersión", ha reiterado.