El Gobierno concertará 205 plazas para personas con enfermedad mental con las Hermanas Hospitalarias del Sagrado Corazón

El servicio se prestará en la clínica Padre Menni de Pamplona y en el centro hospitalario Benito Menni

El Gobierno de Navarra ha adoptado un acuerdo por el que concertará 205 plazas para personas con enfermedad mental con las Hermanas Hospitalarias del Sagrado Corazón de Jesús, cuyo servicio se prestarán en la clínica Padre Menni de Pamplona y en el centro hospitalario Benito Menni de Elizondo, con el fin de completar la oferta pública. El plazo de duración del contrato será de 4 años, con un valor total estimado de 17,9 millones de euros.

En concreto, se trata de 82 plazas residenciales asistidas para enfermos mentales, 75 plazas residenciales psicogeriátricas, 30 plazas de centro de día y 18 plazas en pisos tutelados y atención para enfermos mentales.

La Agencia Navarra para la Autonomía de las Personas dispone de un dispositivo público para la atención residencial de personas con enfermedad mental de un total de 198 plazas: 34 plazas públicas en atención residencial en el centro psicogeriátrico San Francisco Javier, 4 plazas en piso supervisado en Tudela, 25 plazas en residencia hogar en Sarriguren, y 135 plazas de centro de día para personas con enfermedad mental en Pamplona, Estella, Tudela y Elizondo, según ha expuesto el Gobierno foral.

Características de las personas usuarias

El servicio de atención residencial para personas con enfermedad mental se presta en edades comprendidas entre los 18 y 65 años, con un nivel de dependencia superior al moderado o acreditar hallarse en grave conflicto familiar y/o ausencia de soporte familiar adecuado.

Por su parte, el servicio de piso tutelado para personas con enfermedad mental incluye una edad entre los 18 y 65 años, con un nivel de discapacidad reconocido superior al 55% o acreditar hallarse en grave conflicto familiar y/o ausencia de soporte familiar adecuado. Para el acceso al centro de rehabilitación psicosocial hay que acreditar una discapacidad reconocida superior al 33 por ciento.

Para el servicio de atención residencial en centro psicogeriátrico se debe tener una edad superior a 65 años o menores de esa edad con deterioro cognitivo que les asimile a persona mayor, con un nivel de dependencia superior al moderado o acreditar hallarse en grave conflicto familiar y/o ausencia de soporte familiar adecuado.

Finalmente, el servicio de centro de día para personas mayores incluye a los mayores de 65 años, con un nivel de dependencia superior al moderado.

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