Ahorrar dinero en mantenimiento. Así de contundentes se muestran desde UGT respecto a las veinte medidas propuestas para el sector ferroviario explicadas por la ministra de Fomento, Ana Pastor, en el Congreso de los Diputados. Tan sólo unos días después de que un tren descarrilara dejando 79 víctimas mortales, el ministerio plantea reducir la velocidad "enmascarando" una reducción de gastos. A menor tracción y energía, menos coste.

Fuentes del sindicato aseguran a 20minutos que los veinte puntos planteados por Pastor no aportan nada nuevo, sino que enmascaran una bajada considerable de los costes de mantenimiento. "Está claro que la disminución de los tipos de los trenes y de la velocidad máxima implica menos gasto". De este modo, el impacto sobre infraestructura en función de la velocidad necesita menos desembolso en tracción y en energía. "Es una reducción considerable de costes de carácter general".

Las 20 medidas de Ana Pastor no aportan nada nuevo sobre la mesa, salvo "aprovechar el accidente para reducir costes", aseguran, definiendo la propuesta como una "solución salomónica".

La mayoría de las medidas plantean revisiones que ya se producen habitualmente. Adif, Feve, etc., ya realizan estudios desde sus departamentos de seguridad, que se intensifican cuando hay un accidente.

El segundo paquete de propuestas tiene relación directa con los maquinistas. Se establece revisar los requisitos de acceso o reconocimientos médicos psicofísicos con niveles de exigencia. En concreto, esta acción "debería incrementarse", pero sigue sin ser una novedad. "Cuantas más medidas de seguridad, de auxilio a la conducción, cuanta más tecnología, más riesgo hay de relajación. Cuanto más dotado va un tren, más se confía. Por tanto, es conveniente que las campañas se hagan cada menos tiempo en función de las zonas e índices de accidentabilidad".

Por último, desde UGT aseguran que la única 'solución' para evitar accidentes es aumentar la periodicidad de las revisiones y el repaso de la situación de la red. Hacer un inventario, "que no cuesta dinero", y debatirlo en gabinetes por medio de propuestas. Pero, en ningún caso, recortar.