La mujer natural de la localidad toledana de Villamuelas que resultó herida en el accidente ferroviario de Santiago de Compostela el pasado miércoles se encuentra ingresada en una clínica de La Coruña y tiene siete costillas y una clavícula rota.

Así lo ha confirmado en declaraciones a Europa Press el alcalde de la localidad, Julián Pérez, que además es primo de la joven, de nombre Rosana y de 32 años de edad.

Según a relatado el primer edil del municipio toledano, su prima viajaba sola en el tren siniestrado, aunque tenía previsto viajar el día anterior junto con dos amigas. Se da el caso de que no pudo imprimir el billete de tren del día anterior por haberse quedado sin tinta en la impresora, por lo que tuvo que retrasar su viaje, mientras sus dos amigas le esperaban en Santiago.

Rosana, que es trabajadora del Centro de Salud de Ocaña, pudo mandar un mensaje de texto al móvil de una de las amigas que le esperaban en la estación de Santiago para informarles de que el tren había sufrido un accidente pero que ella estaba bien, pese a las fracturas.

A raíz de este mensaje, las dos amigas de Rosana recurrieron a la guía telefónica para buscar a la familia de la joven herida en la localidad de Villamuelas y poder informarles de lo sucedido.

Tras varias llamadas al azar a la localidad, pudieron contactar con los padres de la chica, que este mismo jueves por la mañana se desplazaron en avión hasta Galicia para acompañar a su hija durante su estancia en el hospital.