Los Mossos d'Esquadra y la Policía Nacional han detenido a 43 personas que formaban parte de un entramado empresarial acusado de estafar un millón de euros a la Seguridad Social. El fraude consistía en un conjunto de empresas que sin contar con una actividad comercial aparente acumulaban un intenso movimiento de trabajadores entre ellas.

Sus responsables captaban los supuestos trabajadores, principalmente de nacionalidad magrebí, que eran dadas de alta a la Seguridad Social por un periodo suficiente para, después, acceder a las diferentes ayudas y prestaciones públicas, así como por poder regularizar el permiso de residencia.

A cambio de este contrato ficticio, los trabajadores abonaban unas cantidades que oscilaban entre los 400 euros mensuales en concepto de vida laboral y los 1.000 euros por contrato en caso de regularización de extranjeros. También se detectaron casos en los cuales el responsable de este entramado empresarial contactaba con empresarios individuales para que contrataran a su nombre empleados ficticios.

Los Mossos d'Esquadra pudieron ubicar el responsable de la trama, un empresario con domicilio en la Bisbal d'Empordà el cual había dado de alta, de forma irregular, más de 160 trabajadores.

Los detenidos están acusados de los delitos de falsificación documental, fraude a la Seguridad Social y favorecimiento de la inmigración clandestina.