Una pieza defectuosa en el cambio de agujas de Bretigny sur Orge fue la causa del descarrilamiento que se produjo el viernes en esa estación a una treintena de kilómetros al sur de París, en el que murieron seis personas y treinta resultaron heridas, indicó este sábado la compañía ferroviaria SNCF.

La fijación, una pieza metálica de una decena de kilos, se soltó y eso "impidió el paso normal de las ruedas (del tren) y causó el descarrilamiento", señaló el director de infraestructuras de la Sociedad Nacional de Ferrocarriles, Pierre Isar, en conferencia de prensa.

Isar reconoció que no se sabe por qué solo se produjo el descarrilamiento a partir del cuarto vagón, ni por qué otro tren que había circulado media hora antes del siniestro por ese mismo cambio de agujas no tuvo ningún incidente.

En cualquier caso, anunció que "a partir de mañana (por el domingo)" se van a examinar las 5.000 eclisas (nombre técnico de esas piezas) similares que hay en toda la red ferroviaria francesa.

"Las razones por las que esa eclisa se soltó es el objetivo de la investigación", subrayó el presidente de la SNCF, Guillaume Pépy, que recordó que se están desarrollando simultáneamente tres procedimientos para determinar los motivos del siniestro, uno por su compañía, otro por la justicia y otro por el Ministerio de Transportes.

Pépy indicó que se están organizando opciones alternativas para la línea París-Limoges, que sigue interrumpida y continuará así por un tiempo todavía desconocido.

El ministro francés de Transportes, Frédéric Cuvillier, había descartado antes que un error del conductor causara el siniestro. "No es un problema humano", afirmó en una entrevista a la emisora de radio RTL Cuvillier, que rindió homenaje al conductor de la locomotora.

"Tuvo unos reflejos absolutamente extraordinarios al activar inmediatamente la alerta, lo que evitó la colisión con un tren que venía en sentido inverso y que por pocos segundos hubiera chocado con los vagones que descarrilaron", explicó.

El ministro confirmó, por otra parte, que durante la noche no se han encontrado nuevas víctimas en los vagones que volcaron, y que por tanto las cifras oficiales siguen siendo de seis muertos y 30 heridos, de los cuales ocho están graves.

Este sábado continuaban los trabajos con grúas para comprobar que ninguna persona había quedado entre los amasijos de hierros en que quedaron convertidos los vagones a partir del tercero, que fueron los que descarrilaron.