Sus borracheras, sus juergas, cierta fama de casquivana y su desinhibicion para llevar una vida escandalosa motivaron que el magnate norteamericano Donald Trump, cuya vida privada, no es, tampoco excesivamente edificante, decidiera quitarle el título que la acredita como la más guapa de América.
Se ignora lo que ha sucedido durante el encuentro que ha mantenido con la Miss, pero lo cierto es que está dispuesto a brindarle una segunda oportunidad. Tara no perderá si título, pero tendrá que someterse a un tratamiento de rehabilitación para conservarlo.
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