Exteriores ha destituido al cónsul español en Boston por "incumplimiento de sus obligaciones consulares", según han confirmado fuentes del ministerio a 20minutos.es, al haber cerrado la delegación poco después del atentado que se llevó por delante la vida de 3 personas y dejó más de un centenar de heridos.

Ya desde la pasada madrugada de martes, el cónsul, Pablo Sánchez-Terán, recibió numerosas críticas por sus declaraciones en el programa de televisión Futboleros de Marca TV tras el atentado en el maratón. El diplomático habló en directo para la cadena deportiva y afirmó que a las 4 de la tarde había cerrado el consulado porque "era la hora".

Sánchez-Terán explicó a la cadena de televisión que "había que cerrar el consulado" y recomendó a los ciudadanos españoles que, si querían información sobre posibles heridos o afectados por las explosiones de Boston, que llamaran a los hospitales o a la policía local.

La embajada en Washington y el cónsul habían informado de que no había españoles entre las víctimas, pero sus declaraciones fueron criticadas por los tertulianos y numerosos espectadores a través de las redes sociales, que se preguntaban cómo podía cerrarse la sede diplomática justo después de los atentados, cuando había 91 españoles inscritos en la carrera y familiares que podrían necesitar algún tipo de asistencia.

El cónsul se remitió al número de teléfono para urgencias consulares. 20minutos.es ha intentado contactar con la oficina mientras estaba cerrada y ha obtenido la respuesta de un contestador automático que daba un número de teléfono recalcando que se era solo para españoles en situación de emergencia.

Fuentes del ministerio de Asuntos Exteriores aseguran que tanto el consulado de Boston como la embajada española en Washington han estado en constante coordinación con la diplomacia española. Además, afirman que el teléfono de emergencia estaba operativo y se podía contactar en todo momento con el consulado si sucedía algo.

Este lunes, tras conocerse las polémicas declaraciones del cónsul, la red social Twitter se inundó de mensajes sobre su actitud, la mayoría de ellos en tono irónico y crítico. A continuación, una breve selección.