La Audiencia de Málaga ha condenado a tres años de prisión a un hombre por intentar acabar con la vida de una camarera de piso de un hotel de la localidad malagueña de Benalmádena, a la que puso una bolsa en la cabeza y arrinconó contra la pared. Además, se le impone el pago de 510 euros como indemnización.

Los hechos sucedieron en septiembre de 2009. Según la sentencia, a la que ha tenido acceso Europa Press, la mujer estaba trabajando y entró en una habitación para arreglarla, cruzándose con el procesado, de 23 años entonces, que salía de otra habitación que ocupaba con su familia.

Cuando la mujer estaba fregando la bañera, el procesado se acercó por detrás y le puso una bolsa en la cabeza "con la intención de quitarle la vida", según la resolución, arrinconándola contra la pared, momento en el que ella logró darse la vuelta y ver al procesado, que le puso la mano en la cara y la empujó.

La mujer, dice la Sala, consiguió quitarse la bolsa, pero el hombre "le tapó la boca y la nariz con la intención de ahogarla". Al intentar defenderse, la víctima cayó con medio cuerpo en la bañera y el acusado "intentó introducirla completamente", pero ella cogió fuerza para "agarrar del pelo al agresor", logrando que saliera.

Por estos hechos, la mujer sufrió varias lesiones. Al hombre se le ha condenado por un delito de homicidio en grado de tentativa, con la eximente incompleta de alteración psíquica, ya que entonces estaba en un descenso del nivel de conciencia o estado crepuscular con actividad alucinatoria psicópata y amnesia anterior y posterior.

Además de la pena de tres años de prisión, al acusado se le impone la medida de seguridad consistente en internamiento para tratamiento médico o educación especial en un establecimiento adecuado al tipo de anomalía o alteración psíquica que padece durante un periodo de cinco años.