La Secretaria para la Igualdad de UGT-Euskadi, Emilia Málaga, ha denunciado, con motivo del Día Internacional de la Mujer Trabajadora, que las mujeres siguen soportando "una mayor precariedad" y que el 50 por ciento de sus contratos son "a tiempo parcial".

En un comunicado, Málaga ha indicado que el panorama es "desalentador" para las trabajadoras vascas, con una tasa de actividad que no llega al 50 por ciento, un "elevado" desempleo y unos ingresos en torno al 23 por ciento inferiores a los de los varones.

"Las mujeres —denuncia— siguen soportando mayor precariedad en la contratación, donde el 50 por ciento de los contratos que firman son a tiempo parcial, cuando esta modalidad supone el 38 por ciento en el total de la contratación".

Según ha indicado, a ello hay que añadir la "repercusión negativa" que supone en las prestaciones por desempleo y en las pensiones futuras. UGT ha señalado que, ante un contexto de crisis en el que la reactivación de la economía puede servir a algunos "como pretexto para no combatir la discriminación", Emilia Málaga ha apostado por actuar tanto en el ámbito laboral como en el social y reforzar la inversión pública en infraestructuras sociales.

A su juicio, la apuesta por las políticas de igualdad debe renovarse y ser más "incisiva, alumbrando nuevos instrumentos legislativos y reforzando el papel de la Inspección de Trabajo".

Por otra parte, UGT-Euskadi ha anunciado una nueva campaña de información y sensibilización en los centros de trabajo para que las trabajadoras conozcan sus derechos y puedan reclamarlos y persistir".

En este sentido, ha aludido al caso de una trabajadora, afiliada a UGT, que tuvo que acudir dos veces hasta el Tribunal Constitucional para que se le reconociera su derecho de conciliación para cuidar a un hijo menor.

Según ha indicado, la afiliada, Asistida por los servicios jurídicos de UGT, acudió al Tribunal Europeo de Derechos Humanos, que finalmente ha estimado la demanda presentada condenando a España por "vulnerar el derecho a un proceso equitativo y una decisión razonable y al abono de la indemnización que se reclamaba para la trabajadora por el daño moral sufrido".

UGT ha denunciado que la "lentitud" de la Justicia ha hecho que, para cuando el TC le ha dado la razón, esta trabajadora no pudiera ya ejercer sus derechos de conciliación, debido a que el menor ya había sobrepasado la edad límite para el disfrute del mismo.