Diviertt S.L., administrada por los promotores Miguel Ángel y José María Flores, ha cancelado sine die la celebración del Spacefest 2013, la macrofiesta de música electrónica que se había aplazado al próximo 17 de marzo y que no se pudo celebrar tras la tragedia del Madrid Arena.

Según comunicó Diviertt este martes, la empresa ha buscado sin éxito un espacio alternativo para el evento. Culpa de su fracaso al Ayuntamiento de Madrid, que, a su juicio, "ha optado por impedir sin más la celebración de ciertos eventos" en la ciudad.

La sociedad no renuncia, sin embargo, a realizar la fiesta en un futuro próximo: "Este emblemático evento no puede desaparecer por la resistencia de ciertos responsables de las administraciones a que tenga lugar lo que es el legítimo disfrute de un buen número de ciudadanos que son fieles a Spacefest o a otros eventos similares".

Respecto al importe de las entradas, que ya ha comenzado a devolver, Diviertt asegura que todos sus clientes verán reintegrado su dinero "conforme a los procedimientos estipulados".

Diviertt es la empresa que organizó la fiesta de Halloween a raíz de la cual murieron cinco adolescentes en 2012. Sus propietarios, los hermanos Flores, están imputados en la causa por haber permitido que el aforo se sobrepasase.

La celebración se realizó en el pabellón municipal Madrid Arena. Una de las primeras medidas tomadas por el Ayuntamiento, propietario del recinto, fue prohibir la celebración de macrofiestas similares en toda la ciudad. Sin embargo, el juez del caso también cree que hubo negligencias por parte del Consistorio, al que acusa de permitir un fallo de seguridad "clamoroso".

El caso aún está bajo investigación. Este martes, el colectivo Manos Limpias, presentó una petición en el juzgado de Instrucción 51 de Madrid, que lleva el caso, para que se investigue por separado a Pedro Calvo, exdelegado de Economía y anterior presidente de Madrid Espacios y Congresos —la empresa pública a través de la que el Ayuntamiento gestionaba el Madrid Arena—. La procuradora ha incluido en su petición al exvicealcalde de Madrid, Miguel Ángel Villanueva.

El colectivo cree que ambos pudieron cometer un delito de prevaricación y tráfico de influencias por los favores y prebendas presuntamente concedidos a los hermanos Flores. Estos gozaban de un contrato preferente para organizar fiestas en el Madrid Arena. Además, Villanueva era amigo personal de Miguel Ángel.