Una selección de 36 pinturas de los siglos XVI al XIX muestra en Burgos la visión que occidente ha tenido de la niñez

La sala de exposiciones de la Casa del Cordón de Burgos acoge desde hoy 'Príncipes y granujas. Los niños en la gran pintura europea de los siglos XVI-XIX', una muestra compuesta por 36 pinturas de la colección 'Nins' de la Fundación Yannick y Ben Jakober sobre la visión que la cultura occidental ha dado de la niñez.
Exposición Caja de Burgos
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CAJA DE BURGOS
Exposición Caja de Burgos

La sala de exposiciones de la Casa del Cordón de Burgos acoge desde hoy 'Príncipes y granujas. Los niños en la gran pintura europea de los siglos XVI-XIX', una muestra compuesta por 36 pinturas de la colección 'Nins' de la Fundación Yannick y Ben Jakober sobre la visión que la cultura occidental ha dado de la niñez.

La exposición, que puede verse hasta el 28 de abril, incluye obras de la escuela holandesa, flamenca, centroeuropea, inglesa, francesa, italiana y española.

La representación plástica de la niñez desde la Edad Media hasta el Siglo de las Luces ayuda a dibujar el progresivo cambio de mentalidad operado en la sociedad occidental.

Esa metamorfosis parte de una concepción que considera al niño simplemente como un prototipo de ser adulto al que hay que modelar conforme a determinados criterios, para desembocar, tras la Ilustración, en una nueva corriente de pensamiento que establece una diferenciación humanista entre el mundo adulto y el mundo de la infancia y convierte al niño en un asunto público con el nacimiento de la escuela, de la pedagogía como ciencia y del juego como herramienta formativa.

Los textos de sala y todos y cada uno de los materiales utilizados en la exposición han sido creados y producidos en exclusiva por el equipo de Caja de Burgos.

La exposición se estructura entorno a cuatro capítulos que llevan por título 'Reflejos de la corte', 'Paraíso doméstico', 'Jardín de infantes' y 'Donde el sol de la infancia'.

En el primer capítulo, 'Reflejos de la corte' se incluyen ocho obras donde destaca el doble retrato de Luis XIV de Francia y su hermano Felipe, el dedicado al futuro zar de Rusia Pablo I y el de Mariana Victoria de España.

En 'Paraíso doméstico' se han incluido trece pinturas en las que perros, caballos, cabritos y aves domesticados ejemplifican qué se esperaba del niño.

En 'Jardín de infantes' se puede ver una selección de imágenes en las que los niños posan con sus juguetes y artefactos de diversión y en la mayoría de los casos al aire libre o con un paisaje abierto al fondo, como defendían los manuales de enseñanza surgidos tras la Ilustración para la educación de los niños.

Por último, 'Donde el sol de la infancia' recoge la visión renovada de la infancia, su redescubrimiento como territorio común, como el espacio soñado al que deseamos regresar.

La muestra 'Príncipes y granujas' se completa con un catálogo realizado al efecto y editado por Caja de Burgos, que contiene textos de Yannick Vu y de numerosos especialistas en pintura europea de Holanda, Inglaterra, Francia, Rusia y España aportados por la Fundación Yannick y Ben Jakober.

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