El delegado del Gobierno en Castilla-La Mancha, Jesús Labrador, ha señalado que el suceso ocurrido este miércoles en Ciudad Real, después de que un policía local matara presuntamente a su expareja y luego se suicidara, "debe hacernos reflexionar a todos" sobre situaciones de violencia de género y "estar atentos y vigilantes" a esos casos.

A preguntas de los medios antes de clausurar el XXII Campeonato Nacional de Judo de la Guardia Civil, Labrador ha advertido de que apoyar a las mujeres que son objeto de violencia de género es "una obligación" que tiene toda la sociedad, que debe dar su apoyo "a cualquier persona que sea víctima de un ataque tan execrable".

Dicho esto, Labrador ha confirmado que el policía local tenía una orden de alejamiento "desde finales de diciembre" que "fue levantada, entre otras cosas, porque la denunciante había retirado la denuncia" y al retirarse esa orden al policía local se le tuvo que entregar "una pistola que tenía" de carácter "particular".

El delegado del Gobierno ha remarcado que los hechos no se cometieron con el arma reglamentaria, que todavía no se había entregado "porque no se había hecho la tramitación" correspondiente para ello.