La fiscal de la Audiencia Nacional Olga Sánchez pide penas que superan en total los 270.000 años de cárcel para los 29 procesados por los atentados del 11-M como autores de 191 asesinatos consumados y 1.824 intentados, tantos como víctimas hubo en los trenes, aunque no podrán cumplir más de 40 años efectivos en prisión.

En su escrito de acusación, que la Fiscalía presentará mañana ante la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional, Olga Sánchez sostiene que tres de los procesados -Rabei Osman El Sayed, "El Egipcio"; Youssef Belhadj y Hassan El Haski- fueron los autores intelectuales de la matanza junto a uno de los siete suicidas de Leganés (Madrid), Serhane Ben Abdelmajid, "El Tunecino", al que considera "jefe ideólogo de la célula" que perpetró la masacre.

La fiscal defiende además que fueron doce los autores materiales de los atentados en los trenes:

Para argumentar la autoría material de Zougam, Bouchar y Ghalyoun, Olga Sánchez asegura que los tres han sido identificados por pasajeros de los trenes, mientras que el juez instructor del sumario, Juan del Olmo, explicó en el auto de procesamiento que los testigos de la masacre sólo reconocieron "sin ningún género de dudas" a Lamari y a Zougam.

En cuanto a Ghalyoun, Del Olmo sostuvo que su identificación como autor ofrecía dudas porque la única persona que le sitúo en los trenes no le volvió a identificar en posteriores pruebas.

Según la fiscal, a estas doce personas se les puede atribuir la autoría material porque se encontraron huellas y restos de ADN de tres de los suicidas y de los dos huidos en la Renault Kangoo en la que transportaron las bombas hasta la estación de Alcalá de Henares, así como en un Skoda Fabia hallado meses después de la masacre, vehículos en los que también fueron encontrados restos de Goma 2 ECO.