La oleada de inmigrantes que llegan en lanchas de juguete hinchables a las costas de Algeciras (Cádiz) ha saturado los calabozos de la Policía Nacional en la ciudad, según ha denunciado el secretario general de la Unión Federal de la Policía (UFP) en Andalucía, Víctor Duque.

En los últimos tres meses se han interceptado a más de 400 inmigrantes, 75 en los últimos dos días, que han sido trasladados al puerto de Tarifa, desde donde son conducidos a la Policía Nacional, que se encarga de su ingreso en los calabozos de la Comisaría de Algeciras.

Esta situación, además de ralentizar los trámites de expulsión y de investigación de las mafias de la inmigración, ralentiza el trabajo ordinario de seguridad ciudadana en cuanto a custodias, conducciones y puestas a disposición judicial.

Además, esto provoca que se  deje en libertad al 90 % de los inmigrantes que son puestos a disposición policial ya que, según la ley, la estancia máxima en los calabozos es de 72 horas. Después, los inmigrantes son trasladados a los Centros de Internamiento de Extranjeros (CIE). Pero la situación allí es similar. El centro de Isla de las Palomas, en Tarifa, alberga a unas 150 personas y el de La Piñera, en Algeciras, a 160.

Todo ello lleva a que "se les ponga en libertad, con una propuesta de expulsión, que no se lleva a efecto en la mayoría de los casos", explica Duque.

El secretario autonómico de la UFP se lamenta de que están "desbordados y asegura que desde el sindicato están "hartos de pedir refuerzos" porque "esto no es un problema de la Comisaría de Algeciras, sino de la Dirección General de la Policía", explica.