«También permitirá reducir la siniestralidad ya que podremos comunicar inmediatamente a los conductores, a través de los paneles informativos, cualquier problema en la calzada o la previsión del tiempo».

El sistema se pondrá en marcha «en breve» en las avenidas de Castelao y de Europa y «la idea es ir haciendo la instalación del cableado desde la periferia hasta el centro para ver cómo funciona». Carrera confirmó también que los nuevos radares y los semáforos de LEDS instalados en 2005 se van a «adaptar sin problemas al sistema que se está implantando en la ciudad».

Reacción inmediata

Al unificarse todos los elementos, el técnico de Tráfico recibirá en su ordenador las incidencias y, gracias a la velocidad de transmisión de la red de fibra óptica, dará una solución inmediata. Esto implica que, cuando haya atasco en un punto cualquiera, los técnicos manipulen la frecuencia de los discos de los semáforos para vehículos y peatones, en función del tráfico. Esto ahora no es posible, ya que «el tiempo de respuesta es de aproximadamente cinco minutos», según explicó Carrera.

Cuidado con correr. Radares

Al integrarse los radares en el sistema, todas las infracciones se pasarán de inmediato al ordenador central. La gestión de las multas será más rápida, porque los operarios ya no se desplazan hasta el radar para recoger los datos en una tarjeta de memoria.

Como cámaras web. Visualización

El ancho de banda que aporta la fibra óptica hará que las cámaras retransmitan la señal en directo. Las personas que lo deseen podrán consultar el tráfico en directo en la web del Concello antes de salir de casa con una definición mucho mejor que la actual.

A distancia. Tecnología GPRS

Los puntos en los que no se puede instalar el cableado de fibra óptica por falta de infraestructura tendrán conexión permanente con la central por GPRS. Los técnicos podrán, por ejemplo, modificar la frecuencia de esos semáforos desde la sala de tráfico.