Audiencia confirma 2,5 años de prisión para un hombre que se hizo pasar por policía y multó a un conductor

La sección primera de la Audiencia Provincial de Castellón ha confirmado una sentencia del juzgado de lo penal número cuatro de Castellón que condena a un hombre a dos años, seis meses y un día de prisión por multar a un conductor haciéndose pasar por policía.

La sección primera de la Audiencia Provincial de Castellón ha confirmado una sentencia del juzgado de lo penal número cuatro de Castellón que condena a un hombre a dos años, seis meses y un día de prisión por multar a un conductor haciéndose pasar por policía.

Así, la Sala desestima un recurso de apelación interpuesto por el acusado contra la sentencia que le condena por delito continuado de estafa en concurso medial con un delito de usurpación de funciones públicas y dos delitos contra la seguridad vial por conducir sin permiso.

La sentencia recurrida da como hechos probados que el 1 de diciembre de 2008 el procesado conducía un vehículo en la localidad de Borriol (Castellón) cuando vio pasar una furgoneta cargada de leña en la que viajaba un matrimonio al que dio el alto actuando como si fuera un policía, sin llevar uniforme ni coche oficial.

El acusado pidió a los ocupantes de la furgoneta que se bajaran de la misma y se identificaran y solicitó al hombre la documentación del vehículo, haciendo ver que llamaba por teléfono a otro compañero para comunicarle la retención.

Al observar que la furgoneta estaba a nombre de una amiga del conductor, el acusado insinuó que era sustraída y que había que hablar con la propietaria de la misma, por lo que fueron los tres a su domicilio.

Como ésta no estaba, volvieron a Borriol y, "con ánimo de obtener un inmediato e ilícito enriquecimiento patrimonial", el procesado impuso al conductor una multa de 1.255 euros por circular con más leña de la permitida y por no estar el vehículo a su nombre.

Ante esto, el conductor pidió ir a casa de su madre, donde el acusado volvió a identificarse como policía y amenazó a la mujer con detener a su hijo si no le pagaba la multa, por lo que ésta accedió a darle 500 euros. El acusado escribió en una tarjeta varias cifras explicando que le debían 755 euros y dijo que un compañero de la policía pasaría otro día a retirarlos.

El matrimonio sospechó del modo de actuar del procesado, por lo que denunció los hechos, lo que permitió su detención ese mismo día mientras conducía un vehículo por Benicàssm y se comprobó que no tenía permiso de conducir.

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