Desde el nacimiento de la fotografía en el siglo XIX, añadir color ha sido una obsesión constante. La búsqueda de una "sustancia camaleónica" que aplicara tonos diferentes cuando la luz cayera sobre la foto resultó fallida. En 1861 James Clerk Maxwell —físico escocés que realizó grandes descubrimientos relativos a los campos electromagnéticos— descubrió que mezclando un filtro rojo, uno azul y uno verde se podía obtener cualquier color sobre una imagen. Era el principio oficial de la fotografía más allá del blanco y negro.

La galería CWC de Berlín (Alemania) —que pertenece al museo de fotografía Camera Work— inaugura el 15 de septiembre Color, una exposición de más de 100 imágenes que explora las posibilidades creativas que los fotógrafos han dado a los colores.

Junto a obras de autores que tuvieron un papel decisivo como Edward Steichen, William Eggleston, Helmut Newton o Martin Schoeller; la galería aporta trabajos actuales. Los tranquilos paisajes (casi abstractos) del israelí residente en Londres Nadav Kander destacan por usar tonos para jugar con el espacio; el fotógrafo de moda australiano Russell James usa el color como expresión de energía y erotismo.

Por primera vez, la galería expone algunas fotos de Martin Schoeller que se escapan de sus célebres retratos frontales de famosos. Una de esas imágenes poco frecuentes en el artista es la que protagoniza Quentin Tarantino, una instantánea atmosférica y llena de movimiento en la que el director de cine se desata una camisa de fuerza mientras unas palomas blancas vuelan a su alrededor.

Relegado al principio a la publicidad y a la moda, el color el vehículo para expresar el deseo por un producto o la imaginación de un diseño. A partir de los años setenta, una exposición de William Eggleston en el Museo de Arte Moderno de Nueva York comenzó a borrar las fronteras entre la foto comercial y la manifestación artística. La exposición repasa esa escalada con fotos del revolucionario Eggleston, polaroids eróticas de Helmut Newton y otros ejemplos que abrieron paso a la consideración de la fotografía a color como arte.