Los agresores, según varios testigos, podrían ser latin kings o ñetas, a juzgar por su ropa y por los gestos que hicieron con las manos.

Sobre las once de la noche, tres jóvenes, al parecer menores, acudieron a la terraza del bar e increparon a los clientes «para que les dieran un cigarro», relatan estas fuentes. «El dueño fue a echarlos porque molestaban y empezaron a decirle barbaridades y a intimidarlo con navajas y palos».

Las víctimas, según explican, llamaron a la Policía, pero cuando los agentes llegaron, los pandilleros habían echado a correr.

Cuando el local cerró, uno de los clientes que había defendido a los trabajadores fue perseguido por los jóvenes. «Lo estaban esperando», explican testigos.

Al escuchar el escándalo y ver que los pandilleros llevaban un enorme cuchillo, algunos vecinos volvieron a llamar a la Policía. «Cuando vieron a los agentes, se escondieron detrás de un coche, pero, después de forcejear, se los llevaron detenidos», comenta una vecina.

Los afectados han denunciado los hechos.

800 miembros de bandas latinas

La estética de los agresores lleva a los vecinos de En Corts a creer que forman parte de alguna de las bandas latinoamericanas, tipo Latin King o Ñetas, integradas por unos 800 jóvenes sólo en Valencia, según fuentes oficiosas. Recientemente, otros pandilleros sembraron el pánico en un parque de la misma zona: amedrentaban a los menores y les robaban.