La cantante estadounidense Lady Gaga ha cancelado definitivamente el concierto que tenía previsto ofrecer en  Yakarta el 3 de junio debido a las amenazas de los grupos integristas islámicos, ha indicado la organización.

El concierto de la polémica cantante, que en su gira asiática ya ha actuado en Manila y Bangkok recientemente, aún no contaba con los permisos de la policía indonesia, que quería que la diva rebajara el tono irreverente y el vestuario sexy del espectáculo.

El abogado de los organizadores del concierto en Yakarta, Minola Sebayang, confirmó que los representantes de la artista neoyorquina habían decidido cancelar el evento por los problemas de seguridad.

"Con las amenazas que hay por si el concierto se celebra, por parte de Lady Gaga se cancela. No se trata sólo de su seguridad, sino de la de todos los que vayan a verla", dijo el abogado, según el diario The Jakarta Post.

Los organizadores devolverán el importe de las 52.000 entradas que ya habían vendido a los fans de la cantante de 26 años en el mayor país de mayoría musulmana en el mundo.

El Frente de Defensores del Islam (FPI), una organización radical indonesia, acusó este mes a la autora de Alejandro, Bad Romance o Born This Way de contener "versos satánicos" en sus letras y promover la pornografía.

El grupo amenazó con acudir al aeropuerto internacional de Yakarta cuando llegase la cantante para impedir que actuase en la capital.

En caso de que la primera táctica fracasase, pensaban infiltrarse entre los espectadores del concierto para sabotear el espectáculo en el estadio Bung Karno de Yakarta, el mayor por capacidad en la gira asiática de la cantante.

Alrededor del 85% de los 240 millones de habitantes de Indonesia profesa el islam, mayoritariamente moderado.

La gira oriental de Lady Gaga no ha estado desprovista de polémica.  "Acabo de aterrizar en Bangkok! Preparada para 50.000 monstruos tailandeses gritando. Quiero perderme en un mercado de mujeres y comprarme Rolex falsos", tuiteó la cantante al llegar a la capital tailandesa. Su comentario provocó algunas críticas. "Somos más civilizados de lo que crees", le dijo uno de sus fans, mientras otros se organizaban para boicotear su concierto.

Sin embargo, las mayores polémicas vienen provocadas por las autoridades de los países que visita durante su gira, generalmente por considerar su espectáculo poco apropiado para ciertas edades o para ciertas culturas.  Así, en Seul (Corea del Sur) las autoridades decidieron clasificar su concierto como solo para mayores de 18 años, considerando que es poco apropiado para menores de edad después de que varios grupos cristianos lo tacharan de "obsceno" y de "contaminante" para la juventud.