Una caldera central de distrito con biomasa como combustible permitirá reducir hasta un 40 por ciento el gasto energético del Campus 'Miguel Delibes de la Universidad de Valladolid (UVA), lo que podría traducirse en un ahorro de 300.000 euros al año.

Esta instalación, cuyo plazo de finalización oscilará entre los 16 y los 18 meses, abastecerá los once edificios que se asientan en el recinto y tendrá un coste que podrá rondar los dos o tres millones de euros, a falta de que concluya la auditoría energética puesta en marcha por la Institución Académica, que serán financiados por el Gobierno de la Comunidad.

Dicha desembolso se realizará gracias al convenio firmado este miércoles entre las consejerías de Fomento y Medio Ambiente y de Educación con la propia Universidad.

Según ha explicado el vicerrector de Infraestructuras de la UVA, Antonio Orduña, quien ha condicionado estas cifras de ahorro a la trigeneración de calefacción para el invierno, aire frío para el verano y luz eléctrica, un consumo energético que ronda anualmente los 800.000 euros.

En declaraciones recogidas por Europa Press, Orduña ha subrayado que, junto a esta medida, se busca "mejorar la sostenibilidad y la eficiencia", a través de "un uso racional de la energía" que sea "respetuoso con el medio ambiente". Para ello, se promoverán "hábitos de consumo" a través de cursos que eduquen "en el ahorro".

Plan energético uva

Estas medidas se incluyen dentro del Plan Energético de la UVA, que se traducirá en la realización de estudios para trasladar este proyecto al resto de campus de la Universidad, así como de la "mejora de las envolventes en edificios y la sustitución de ventanas" en edificios como la residencia Alfonso VIII, la Facultad de Medicina y la Escuela de Ingenierías Industriales de Valladolid, así como la Escuela de Técnica Superior de Ingenierías Agrarias de Palencia.

Asimismo, se sustituirán las calderas de gasóleo, muchas de ellas "anticuadas", por otras de biomasa o de gas, el cambio de luminarias o la instalación de detectores de luz natural.

Dichas actuaciones se incluyen también dentro del programa de la Junta de Castilla y León para sustituir las calderas de los edificios públicos por nuevas de biomasa.

Precisamente, a la firma de este convenio han asistido el consejero de Fomento y Medio Ambiente, Antonio Silván; el de Educación, Juan José Mateos, y el rector de la UVA, Marcos Sacristán.

Silván ha subrayado que esta medida supone "la punta de lanza" de un plan con el que el Ejecutivo autonómico aspira a ahorrar entre un 20 y un 30 por ciento en la factura energética, así como a "reducir el efecto invernadero" y "prevenir los incendios forestales" merced a la limpieza de la maleza forestal que genera.

"sensibilidad" de la uva

Por su parte, Mateos ha resaltado la "sensibilidad" que, a su juicio, ha mostrado la Junta para lograr un ahorro energético, mientras que ha apostado por "integrar a la Formación Profesional" en este nuevo modelo de gestión.

Finalmente, Marcos Sacristán ha mostrado su "satisfacción" por una iniciativa que "al margen de ahorrar en la factura energética", permitirá "asegurar el mantenimiento del planeta".