Las bandas latinas establecidas en Catalunya ganan adeptos (hay 80 pandilleros más que en 2005 y ya sobrepasan los 2.000)  por el reagrupamiento familiar, al que tienen derecho los inmigrantes regularizados.

Los jóvenes carecen de permisos de trabajo y su situación es crítica.

Aumentan los pandilleros

A medida que aumenta la población juvenil latinoamericana –35.000 empadronados de entre 15 a 24 años–, también lo hacen los pandilleros, cuyos máximos exponentes son los Latin King y los Ñetas.

Los primeros se convertirán en una asociación legal, mientras que los Ñetas, por el momento, prefieren mantener su actividad clandestina.

«El aumento de miembros en las bandas oscila entre el 2 y el 4% al año», según Carles Freixa, antropólogo y estudioso de las culturas juveniles, que ayer participó en unas jornadas organizadas por Casa América.

Los ‘reyes’ serán legales

El fenómeno, según Freixa, "se encuentra en un momento interesante, pero también vulnerable".

Los Latin King, los reyes, han optado por abandonar la actividad delictiva e integrarse socialmente como asociación legalizada.

Un hecho que se plasmará antes del verano cuando Justícia apruebe sus estatutos.

Los Ñetas, la segunda banda en importancia, inició el proceso, pero se ha encallado por  la oposición de los«que pretenden actividades poco claras».

No hay "maras"

Los expertos avanzaron que "no se disolverán las bandas latinas", aunque se legalicen.

"No seamos ingenuos: los Latin King pueden reaparecer en cualquier momento".

Aunque haya exponentes, aquí no se detectan otras pandillas, como la sanguinaria Mara Salvatrucha.

Conexiones internacionales

Para el proceso de legalización de los Latin King en Catalunya han sido necesarias negociaciones intercontinentales.

Para desbloquear su reconversión o legalización se ha requerido el beneplácito de altos mandos de Estados Unidos, Ecuador y otros paises.

"Lo que pasa en Guayaquil puede afectar a las bandas de aquí", asegura Carles Freixa, y "a la inversa".

El proceso está siendo seguido minuciosamente por otros Latin King que, como en Ecuador o en Italia, pueden seguir los mismos pasos.