El alcalde de Vigo, Abel Caballero, ha estimado que el posponer las licitaciones del AVE gallego hasta que llegue el nuevo Ejecutivo no supondría "un problema" puesto que se trataría de un plazo de "un mes", si bien ha manifestado su "preocupación" ante la posibilidad de que esa actuación sea "un intento de paralización", algo que, según ha destacado, sería "gravísimo".

En declaraciones a los medios, durante una visita al pabellón polideportivo de Candeán, el regidor olívico ha asegurado que "lo importante es que se adjudique" la alta velocidad y que "la clave es que no signifique una paralización 'sine die', porque sería un drama y una catástrofe".

Así, ha calificado como "muy importante" que las obras "se adjudiquen cuanto antes", al tiempo que ha mantenido que si el PP quiere esperar a cuando esté en el gobierno, y que no lo haga el actual Ejecutivo en funciones, "vale", puesto que se trataría de un mes de espera.

En todo caso, el socialista ha considerado que los populares tendrían que haber aplicado ese mismo criterio en el gobierno de Fraga, cuando realizó "adjudicaciones multimillonarias" estando en funciones.

Entre ellas, el regidor citó adjudicaciones de "casi 100 millones de euros" realizadas por Alberto Núñez Feijóo cuando era conselleiro, la adjudicación por parte de Fraga de la Cidade da Cultura "que acabó en 450 millones de euros" y las adjudicaciones de "televisiones y emisoras de radio".

"otro criterio"

Así, ha afirmado que "allí se aplicó otro criterio" distinto del que el PP solicita ahora al Gobierno en funciones. De igual modo, ha llamado la atención sobre que, antes, "cada día que se retrasaba el AVE era un drama" para los populares y "ahora parece que no les preocupa mucho que se retrase". No obstante, ha abogado por "desdramatizar" la situación y ha defendido la aplicación de criterios "coherentes".

Finalmente, también ha considerado que deberían "disculparse todos los miembros de aquel gobierno, el señor Feijóo incluido, por haber hecho adjudicaciones en funciones" y ahora exigirle al Gobierno de España "que no las haga".