La calefacción central supone hasta un 50% del gasto de las comunidades de vecinos

Decálogo para ahorrar en calefacción

• Mantener la temperatura en el interior de la vivienda en torno a los 21º.
• No regular la calefacción en función de la temperatura de los radiadores (lo importante es que la temperatura se mantenga estable dentro de casa).
• Revisar el estado de las ventanas de la vivienda con el fin de evitar pérdidas innecesarias.
• En las viviendas que, por proximidad a la caldera u otro tipo de factores, reciben más calor, es conveniente cerrar los radiadores y/o instalar válvulas termostáticas (así se desvía la energía sobrante hacia las viviendas que más la necesitan).
• En caso de ausencia prolongada de la vivienda, es conveniente cerrar todos los radiadores.
• Retrasar la hora de encendido de la calefacción los fines de semana (por lo general los vecinos se levantan más tarde).
• Retrasar el horario de calefacción en relación con el horario establecido el año anterior (entre quince minutos y media hora por la mañana y quince minutos y media hora por la noche).
• Instalar una sonda que aplique un corte del servicio de calefacción al detectar una temperatura exterior elevada (en ocasiones se producen aumentos de temperatura, mientras que nuestro sistema de calefacción central continúa adaptado a una temperatura inferior).
• Colocar contadores de energía en los radiadores, de tal forma que se facture de forma individual en función del consumo de cada vivienda (fomenta el ahorro pero requiere de una inversión importante).
• A largo plazo, invertir en sistemas de regulación automáticos y en la instalación de calderas de alta eficiencia energética.