Una pasarela peatonal de 500 metros que partirá de los Jardines de Pereda conectará por encima del nivel del suelo este parque con el Centro de Arte Botín, concretamente con una plaza abierta que articulará los dos edificios de los que constará esta infraestructura "suspendida" sobre el mar, que tendrá una superficie de 6.000 metros cuadrados y supondrá una inversión de 62 millones de euros a cargo de la Fundación Botín que, además, aportará 7 anuales para su programación estable.

La pasarela se prolongará más allá de esta plaza abierta, de 500 metros cuadrados, a través de un trampolín de 25 metros que se extenderá por encima de la Bahía y se convertirá en un mirador desde donde se podrá contemplar la capital cántabra, según ha explicado el arquitecto del edificio, el genovés Renzo Piano, en la presentación que ha tenido lugar este viernes en Santander, y a la que ha acudido el presidente de la Fundación Botín y del Banco Santander, Emilio Botín.

El proyecto incluye también la ampliación del paseo a lo largo de la Bahía y el rediseño de los Jardines de Pereda que, junto con el parque que se construirá aparejado a este centro, permitirán contar con un espacio verde de 38.000 metros cuadrados, casi el doble que actualmente.

Además, la ejecución del Centro incluye el traslado de la Grúa de Piedra que, según ha garantizado la Fundación Botín, continuará teniendo un lugar "destacado" en el Muelle de Albareda.

De los dos edificios de los que constará el Centro Botín, uno a cada lado de la plaza, el del oeste tendrá una superficie de 2.500 metros cuadrados destinados a galerías y áreas de apoyo distribuidos en dos niveles.

Debajo de estos dos pisos se situará la entrada del Centro Botín, además de un restaurante y una tienda.

Por su parte, el edificio ubicado en el ala este, también de dos niveles, acogerá actividades multiculturales, como reuniones, seminarios o programas de formación organizados por la Fundación Botín, además de un auditorio de 400 metros cuadrados con 300 asientos desmontables en el nivel superior del edificio.

Cada una de las alas de este edificio, que serán 100 por 100 transparentes desde el Paseo, estará sostenida sobre cuatro columnas y tendrá 18 metros de altura, lo que permitirá no sobrepasar ni a los edificios ni a los árboles del entorno.

DIMENSIONES

Piano ha explicado que el proyecto que finalmente se ejecutará tendrá 2.000 metros cuadrados menos que el inicial, si bien ha aclarado que la reducción del espacio "no afecta a ninguna funcionalidad" porque todos "los usos" se mantienen y lo que se ha hecho es "aprovechar mejor el espacio".

El arquitecto ha añadido que, de los 6.000 metros cuadrados que tendrá de superficie el edificio, sólo quedarán a la vista 5.000 ya que el resto estarán bajo el suelo.

A las objeciones planteadas sobre las dimensiones, Piano ha explicado que al ser una infraestructura "pequeña" no robará mucho terrero a Santander, sino que "lo va a añadir" puesto que se trata de un edificio "público" para "que la gente lo disfrute" y con el que se pretende "revitalizar la ciudad" a modo de "fertilizante".

"Es un lugar de encuentro, disfrute, experiencia y vida", ha resumido Piano, quien ha resaltado la importancia que en él ejercerá la luz natural —el elemento que, según ha dicho, contribuye a crear la "magia" en los espacios_y el agua.

Precisamente, en cuanto a la relación entre este edificio y el agua, el arquitecto ha asegurado que se trata de "una forma de celebrar la transición entre la tierra y el mar".

MATERIALES

Además del cristal, el arquitecto ha revelado que usará en la construcción de este edificio la cerámica, un material que, según ha justificado, "viene de la tierra, es natural, muy duradero, ligero" y aporta una "presencia luminosa y brillante, además de alegre y vivaz".

El acero será, según ha explicado, otro de los componentes que "probablemente" usará para este Centro, para el que se emplearán materiales "ligeros" para conseguir un edificio que "no enseñe sus músculos" ya que "no trata de ser grandioso, sino sutil".

En lo relativo a los plazos que se manejan, Piano ha señalado que actualmente se está terminando el diseño esquemático del edificio, que se prevé que se inaugure en 2014, para comenzar a trabajar en los detalles y poder iniciar las obras "cuanto antes".

"No va a ser un edificio que va a quedar en el papel mucho tiempo", ha asegurado.

150.000

Visitas anuales

Por su parte, el presidente del Banco Santander y de la Fundación Botín ha resaltado que la conclusión del Centro coincidirá con el 50 aniversario de la creación de la Fundación Botín.

En cuanto al impacto que tendrá esta infraestructura, que aspira a conseguir ya en su primer año 150.000 visitas anuales, Botín ha asegurado que generará un nuevo espacio urbano en Santander y dotará a Cantabria de un centro artístico de "primer nivel" y de "referencia mundial, global y local" y un centro de formación "pionero el mundo".

En este último ámbito, el de la formación, Botín ha adelantado que será sede del Máster en Creatividad que imparte junto con la Universidad de Cantabria, una institución con la que, además, está analizando la posibilidad de crear un grado universitario.

La Fundación Botín gestionará esta infraestructura durante 52 años a través de una concesión administrativa ya que se ubicará en un terreno de la Autoridad Portuaria, a la que volverá después de ese tiempo.

Una ventana al arte y la modernidad

El presidente de Cantabria, Ignacio Diego, ha calificado la construcción de esta infraestructura como un "hito importante" que permitirá "abrir una ventana al arte y a la modernidad".

Para Diego, contar con este Centro supone ascender "varios peldaños" en la oferta cultural de Cantabria y Santander ya que confía que albergue "fondos artísticos de primer nivel".

"Este proyecto será un icono urbano que se vinculará de manera indisoluble a Santander y a Cantabria" y que sitúa a ambas en el "mapa mundial de la cultura", ha manifestado.

A su juicio, este edificio "sobresaliente" permitirá que el objetivo de convertir Santander con la capital del Cantábrico "se acerque", al situarla en la ruta cultural creada en el norte de España, en torno a los edificios Guggenheim (Bilbao), el Kurssal (San Sebastián) y el Niemeyer (Avilés) y aprovechar sus "sinergias".

Una "revolución"

Por su parte, De la Serna ha asegurado que el Centro de Arte será el "mayor y más importante" equipamiento cultural de Santander que "va a respaldar el proyecto de ciudad", centrado en la innovación tecnológica y cultural.

En este sentido, el regidor ha opinado que va a ser una "revolución" en su modelo cultural y ha confiado que produzca "dinamismo" y genere "contagio" al resto de Santander y que sus "raíces" se ramifiquen para crear más actividad cultural.

De la Serna ha destacado el "extraordinario diseño" del edificio" que, según ha revelado, ha sido cambiado "muchas veces" por el arquitecto, al que ha agradecido que "haya sabido escuchar".

Y el presidente de la Autoridad Portuaria de Santander, José Joaquín Martínez Sieso, se ha mostrado convencido de que el Centro se convertirá en "un punto de atracción internacional" que contribuirá a incrementar el tráfico de cruceros y de ferry, así como la inversión empresarial.

Por otra parte, ha recordado que esta infraestructura, que supondrá un "salto cualitativo", actuará en una "zona degradada y "sobrepasada por el tiempo" en las que actualmente hay una vallas que "coartan de la ciudad".

Además, se ha comprometido a que la APS realizará con agilidad los trámites administrativos que quedan por desarrollar para poder comenzar las obras.