El madrileño parque del Retiro estaba abarrotado a primera hora de la mañana de este sábado para celebrar con el Papa Benedicto XVI la 'fiesta del perdón' con la confesión de cuatro peregrinos (dos chicas y dos chicos menores de 30 años). Es la primera vez que Benedicto XVI confiesa a varios jóvenes en el marco de la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ). En este emplazamiento han sido ubicados 200 confesionarios.

Posteriormente, el pontífice se ha dirigido a la Catedral de La Almudena para oficiar una misa para seminaristas. En este acto, al que han asistido 5.000 aspirantes a sacerdotes, el jefe del Estado Vaticano ha hecho un alegato a favor del celibato sacerdotal y ha pedido a los seminaristas que no se dejen intimidar "por un entorno en el que se pretende excluir a Dios y en el que el poder, el tener o el placer a menudo son los principales criterios por los que se rige la existencia".

Benedicto XVI les dijo que no teman que los "menosprecien", ya que eso ocurre con quienes evocan "metas más altas o desenmascaran los ídolos ante los que hoy muchos se postran". El papa dijo que los sacerdotes deben ser santos, para no crear una contradicción "entre lo que somos y la realidad que queremos significar".

Además, el pontífice ha anunciado la proclamación de San Juan de Ávila, patrón de los sacerdores españoles, como doctor de la Iglesia.

En junio de 1993, Benedicto XVI visitó la catedral por primera vez cuando esta fue consagrada por el entonces papa Juan Pablo II.

Después de la misa, Benedicto XVI se ha reunido durante quince minutos en la sacristía de la Catedral de la Almudena con el presidente del PP, Mariano Rajoy.

Se trata del tercer encuentro que el líder de la oposición mantiene con el Santo Padre, después de los contactos mantenidos en Valencia en 2006 y en Santiago de Compostela el pasado año. Tras este contacto, ha podido verse a Rajoy entre los peregrinos, con algunos de los cuales se ha hecho fotos.

El presidente del PP ha regalado al papa dos CD de canto gregoriano del Monasterio de Silos con una encuadernación especial.

En la anterior visita de Benedicto XVI a España, el pasado mes de noviembre, Rajoy saludó al pontífice tras la misa celebrada en la Plaza del Obradoiro de Santiago de Compostela, y le hizo entrega de una virgen peregrina, patrona de Pontevedra. Por su parte, el pontífice regaló al presidente del PP y a su esposa, Elvira Fernández, una medalla y un rosario conmemorativos de esa visita a España.

Tras descansar, el Sumo Pontífice mantuvo una reunión con el Comité Organizador de la JMJ.

Poco después, ha visitado la Fundación Instituto San José, donde ha conocido de cerca esta organización benéfica que trabaja con discapacitados, ancianos y enfermos terminales, entre otros.

La jornada está concluyendo con una vigilia, que está teniendo lugar en el aeródromo de Cuatro Vientos, escenario este domingo de la misa de clausura de la JMJ, y donde pronunciara un discurso y comenzará la adoración eucarística.

Está previsto que los miles de participantes en la JMJ pasen la noche en Cuatro Vientos.