Fue su madre quién le practicó la respiración asistida hasta que llegó una ambulancia que la trasladó en estado grave al Hospital del Valle Hebrón, donde ayer fue sometida a una intervención quirúrgica para aliviar la presión cerebral que sufre a causa del fuerte traumatismo.
Intervención de las autoridades
El padre de la niña ha pedido "a las autoridades competentes que tomen cartas en el asunto" porque, según él, "mi hija está pagando una imprudencia de ellos ya que el dueño de esta atracción no tuvo la previsión de colocar unas protecciones laterales".
El gerente de Port-2000, Adolf Romagosa, ha explicado que el accidente se produjo en la atracción denominada "Titánic" que "sólo es un tobogán, sin ningún elemento de rotación ni mecánico" y ha asegurado que esta instalación tiene todos los permisos en regla, incluido "un visado del Colegio de Ingenieros".
Pese a ello, la atracción ha sido deshinchada y permanece hoy tapada con una lona azul.
La policía portuaria ha elaborado un informe del accidente, con fotografías incluidas, que ha sido entregado al juez que estaba de guardia el domingo.
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