Una veintena de personas, sobre todo, madres con sus hijos pequeños, se han concentrado esta tarde frente a la Delegación del Gobierno para solidarizarse con Habiba (nombre ficticio), una joven de 22 años, a quien el Instituto Madrileño del Menor y la Familia le ha retirado la custodia de su hija de 15 meses por no querer destetarla y negarse a someterse a un programa de psicoterapia, que incluía el aprendizaje de capacidades o habilidades maternales.

En declaraciones a los medios, la psicóloga clínica y psicoterapeuta Gabriella Bianco ha explicado que mediante esta concentración, organizada por la Asociación Naixença, en colaboración con otras entidades, se pretende apoyar a Habiba, cuya hija ha sido "secuestrada por el Instituto Madrileño de Menores y Familia sin un motivo aparentemente justificado y sin una medida legal".

"Una de las razones que han alegado para retirarle la custodia de la niña es que estaba siendo amamantada de manera caótica e injustificada, cuando la Asociación Nacional de Pediatría recomienda la lactancia materna prolongada hasta que la madre y el bebé necesiten de ello", ha explicado.

Así, ha considerado "sumamente grave que en un Estado democrático se le quite un menor a su madre" cuando ambas "quieren estar juntas", ya que, según las evaluaciones realizadas por la psiquiatra y la psicóloga que están siguiendo el caso, existe un "apego muy fuerte", por lo que estas separación puede "perjudicar la salud" de la niña a medio y largo plazo.

En esta línea, Bianco ha advertido de que con esta situación, el sistema neurohormonal de la m enor "se altera muchísimo", de manera que, a su juicio, las consecuencias de la decisión del Instituto Madrileño del Menor y la Familia pueden ser "realmente muy difíciles de reparar en el tiempo".

De este modo, ha avisado de que si la separación de la madre y su hija continúa vigente, en algunos días podría verse la "hospitalización de la niña, porque probablemente, su nivel de estrés subirá alto y su sistema inmunológico se debilitará tanto que podría ser realmente muy vulnerable para contraer infecciones".

"Se va debilitando a una niña a la cual no se le explica por qué la madre ya no está", ha censurado, al tiempo que ha explicado que a la joven, que llevaba cuatro meses en una residencia para madres sin recursos, se la ha expulsado de este centro, por lo que está recibiendo ayuda humanitaria por parte de la Fundación Raíces y está siendo acompañada y asesorada en todo momento por una psiquiatra y un abogado.

Durante la concentración frente a la Delegación del Gobierno, varias madres dieron de amamantar a sus hijos para mostrar su respaldo a Habiba, quien, según Asuntos Sociales de Madrid, carece de las "habilidades necesarias" para cuidar del bebé y tiene "conductas agresivas".