El expresidente de Brasil Luiz Inácio Lula da Silva ha recogido este viernes el III Premio Libertad Cortes de Cádiz, con el que ha sido distinguido "por su denodada lucha contra la pobreza y la exclusión social". El galardonado ha dicho que el premio no es suyo, sino del pueblo brasileño porque "supo ejercitar la democracia de una manera extraordinaria".

El acto se ha celebrado en la Casa de Iberoamérica de la capital gaditana, donde Da Silva ha manifestado que se siente todavía "más honrado" al conocer que este premio fue creado en el seno de la celebración del Bicentenario de la Constitución de 1812, que, según ha destacado, ya planteaba la necesidad de separación de poderes y el fin del absolutismo.

Tras mostrar su satisfacción por el hecho de que "personas que no me conocen reconozcan el trabajo que se hace en Brasil", ha insistido en que el premio "no es a Lula Da Silva, sino a las políticas públicas que han tenido éxito en Brasil".

Considera que es un "homenaje a la sociedad brasileña", que ha llegado a un nivel de "madurez política" que le ha permitido avanzar en la consolidación de la democracia y la estabilidad institucional, resaltando, asimismo, que es un país que vive "en paz internamente" y también con sus vecinos.

"No conozco ningún otro momento en la historia de mi país en que la sociedad fuera tan llamada a ejercitar la democracia", ha aseverado, señalando que es fruto de las políticas que se han llevado a cabo en los últimos años, basadas en principios como el debate y el respeto.

Da Silva ha dicho enorgullecerse del crecimiento "fuerte y continuado" experimentado por Brasil en los últimos ocho años, con logros como la creación de 15 millones de puestos de trabajo. Según dice, eso ha sido posible porque el país "dejó atrás sus frustraciones y escepticismo" y "volvió a creer en sí mismo".

Así, siendo un país "preparado para los retos del siglo XXI", ha logrado convertirse en la séptima economía mundial, y "de seguir igual, Dios mediante, en 2016 seremos la quinta economía mundial"

En el marco de la tarea desarrollada para "combatir las desigualdades y la pobreza", ha aludido a programas como la canasta familiar o Luz para Todos, rechazando que formen parte de una política paternalista. También se ha referido a la educación como uno de los pilares del progreso de Brasil. En este sentido, ha reconocido ser "el único presidente de Brasil que nunca llegó a la universidad", aunque "me enorgullezco de ser el que más universidades ha creado" en el país.

"momentos difíciles" para españa

En su discurso, Da Silva ha hecho referencia a la crisis económica actual, reflexionando que una crisis no la gana un partido político que pueda estar en la oposición, sino que "el que pierde es el pueblo".

En esta línea, manifiesta que la crisis "no es culpa de España, Portugal o Grecia", sino que es causa de la "irresponsabilidad de unos gobernantes" que no tuvieron "la valentía de inspeccionar sus sistemas financieros" y, de este modo, permitieron que "los bancos financiasen la especulación".

"Lamento profundamente que países extraordinarios como España o Portugal estén viviendo momentos tan difíciles como estos" por problemas crearon otros que, además, ya resolvieron los suyos.

Da Silva, que por otra parte cree "indispensable un nuevo sistema de gobierno global", ha sostenido que "el desarrollo económico tiene que estar al servicio de la reducción de las desigualdades sociales", pero sin caer en paternalismos.

Finalmente, ha considerado que este premio servirá para "estrechar más los lazos históricos entre España y Brasil" y ha bromeado esperando que en 2014 las selecciones de fútbol de ambos países puedan jugar la final del Mundial en Brasil, aunque deseando para España un segundo puesto.

El Premio Libertad Cortes de Cádiz fue creado hace dos años por el Ayuntamiento de Cádiz, dentro de su programa 'Cádiz 2012' para la conmemoración del Bicentenario de la Constitución de 1812, con el fin de rendir homenaje a las personas o instituciones públicas o privadas que se hayan caracterizado por la profundización, difusión y extensión de la Libertad en el ámbito iberoamericano o filipino.

En su discurso, la alcaldesa gaditana ha referido que el jurado decidió "por unanimidad" otorgarlo a Lula da Silva en su tercera edición, por considerar que es "un referente universal de la libertad".