El Juanfersa Gijón se impuso hoy al Puente Genil por 25 a 22 y logró el ascenso a la liga Asobal con lo que culmina el trabajo realizado en tan sólo cuatro años de vida desde la fundación del club, que se creo para agrupar la dispersa, pero fructífera cantera gijonesa de jugadores de balonmano.

En el año 2009 un grupo de aficionados la mayor parte de ellos exjugadores o técnicos de balonmano, conscientes de lo desaprovechada que estaba la cantera gijonesa, decidieron fundar un club tras poner de acuerdo a los colegios Inmaculada, Corazón de María, Ursulinas y Fundación Revillagigedo así como al Grupo Astur a los que paulatinamente se unieron varios más.

El 30 de junio de 2009 el Gijón Jovellanos, nombre oficial del club, se inscribe en la Primera división nacional tras lograr la cesión de la plaza del Balonmano Ardoi de Navarra que decidió no salir a competir por problemas económicos.

Desde el primer momento el equipo fue puesto en manos del entrenador gijonés Alberto Suárez perfecto conocedor de la cantera y que ya había logrado el ascenso a Asobal con el Alcobendas y el Logroño.

La primera temporada en Primera división la finalizan en la quinta posición y en la siguiente ya logran el ascenso a la División de Honor Plata con una plantilla formada íntegramente por jugadores asturianos, la mayor parte de ellos jóvenes prometedores reforzados con algún veterano.

El club afronta su primera temporada en la segunda categoría nacional recuperando a algún jugador gijonés que llevaba muchos años fuera de Asturias en diferentes equipos de Asobal como el caso del extremo David Pellitero y Alberto Suárez, y da protagonismo a jóvenes como Alex Costoya y los hermanos Ángel y Miguel Paraja que responden a las expectativas creadas.

Alberto Suárez es nombrado seleccionador juvenil y cuenta primero con el pivote Ángel Paraja y posteriormente con el lateral Alex Costoya y con éste último logra el subcampeonato del mundo de la categoría, y un año después el Campeonato de Europa junior.

En su debut en la División de Honor Plata, el Gijón Jovellanos se clasifica para la fase de ascenso disputada en Cangas del Morrazo pero se queda a las puertas del ascenso al perder por un sólo gol los dos partidos disputados.

Esta temporada, el club gijonés recupera a más jugadores asturianos que estaban jugando fuera como el exinternacional Carlos Rodríguez Prendes o Maxi Cancio, que refuerzan el potencial de la plantilla a la que también llega otra promesa asturiana como es el central Adrián Rodríguez Valdés.

El equipo gijonés se mueve en una presupuesto muy ajustado ya que ninguno de los componentes de la actual plantilla es profesional y todos ellos están compaginando el deporte con sus respectivos trabajos o estudios lo que no fue obstáculo para que desde el primer momento ocupasen las posiciones altas de la clasificación.

El Juanfersa Gijón basa en una fuerte defensa su potencial de juego y además ha hecho de su cancha, el vetusto pabellón de La Arena, un fortín en el que no ha perdido ningún encuentro en toda la temporada cediendo tan sólo un empate ante el filial del Barcelona.

El club tiene además el mérito añadido de haber vuelto a recuperar a la afición local e incluso regional al balonmano que se encontraba muy desilusionada al ver cómo todos los jugadores surgidos de la cantera se marchaban por falta de un equipo asturiano en la máxima categoría.

El ascenso del Juanfersa Gijón supone que Gijón cuente con un equipo en la liga Asobal 30 años después del descenso del Grupo Covadonga, el único equipo gijonés que alcanzó la máxima categoría.

Se da el caso curioso de que en la plantilla del Grupo Covadonga que jugó en la División de Honor militaban Juan de Dios Ruesga y Ángel Paraja padres respectivamente de Juanjo Ruesga y de los gemelos Miguel y Ángel Paraja que forman parte de la actual plantilla de Juanfersa.