La saltadora de pértiga rusa Yelena Isinbayeva, que la semana pasada anunció su retirada, no descarta ahora su participación en los Juegos Olímpicos de Tokyo 2020, poniendo como ejemplo a la española Ruth Beitia, que acaba de colgarse el oro en salto de altura con 37 años.

"Quería retirarme después de ganar otra medalla, el número de Juegos Olímpicos disputados no es un fin en sí mismo. Simplemente sentía que en Río podía competir de verdad por el oro. ¿Qué pasará en los próximos juegos Olímpicos? Solo Dios lo sabe. En principio, nada es imposible", apuntó Isinbayeva en declaraciones al diario ruso Sport-Express.

A sus 34 años, la rusa puso el ejemplo de Beitia, quien ha "ganado el oro en salto de altura con 37 años". "Resulta que es posible ser campeona olímpica a esa edad. Sin embargo, ya anuncié mi retirada y mi intención de concentrarme en otras cosas. Y en general mi vida ha cambiado. Ya veremos según se vaya acercando Tokyo 2020, el tiempo dirá. No voy a decir un 'no' rotundo, pero tampoco voy a prometer nada", concluyó.

Ante la insistencia de Sport Express sobre la posibilitad de su vuelta a las pistas, la atleta replicó: "Cerremos esa puerta. Si más tarde surge la necesidad, la volveré abrir".

Esta reflexión de Isinbayeva llega cuatro días después de que anunciara su retirada en una rueda de prensa celebrada en Río de Janeiro. La pertiguista, doble campeona olímpica, no pudo participar en los últimos Juegos debido al veto de la Federación Internacional (IAAF) al atletismo ruso, a la vista de un informe independiente que denunciaba dopaje de Estado.

La española Ruth Beitia, campeona olímpica en salto de altura, reconoció que está "muy feliz" por su éxito, que es un "sueño hecho realidad" y que espera "seguir disfrutando un poco más del atletismo", aunque no se ve en Tokio 2020.

"Esto no se acaba aquí, el día 27 compito en París y el 1 en Zurich. Luego esta temporada la cerraremos pero nunca se sabe. En Tokio 2020 no me veo, pero sí disfrutando un poco más del atletismo", apuntó la de Santander en su llegada al aeropuerto Adolfo Suárez Madrid Barajas tras volver de Río de Janeiro.