Gwen Jorgensen es la gran dama del triatlón actual. La estadounidense de Wisconsin, actual campeona mundial, ha encadenado diez victorias en las Series Mundiales. Desde su podio en Ciudad del Cabo, si no ganó la prueba en liza es que no competía. Un récord sobre un récord, pues ya la temporada pasada encadenó cuatro primeros puestos en la lucha por el título mundial, algo inédito en la competición femenina. Marcas que se antojan muy longevas para una vecina recurrente de Vitoria-Gasteiz, donde tiene su base para las campañas europeas.

Y sin embargo Jorgensen, de 29 años, es una triatleta tardía. Y no solo al más alto nivel. Un portento físico en el que confiaban desde la Federación de Estados Unidos (USAT). La de Waukesha nunca había competido en triatlón, no estaba especialmente familiarizada con la bicicleta y sus competiciones universitarias tanto en atletismo como en natación no le habían reportado  ningún éxito especialmente relevante. Pero el programa de captación de talentos federativo no bebe solo de resultados.

Su debut en marzo de 2010 concluyó con una séptima plaza en la que la USAT terminó de ver unas condiciones únicas para este deporte. "Yo estaba en estado de shock de lo duro que era aquello", recordaba Jorgensen tiempo después. Convencían los mimbres, pero el trabajo específico tenía obstáculos. El problema estaba en su vida laboral. Jorgensen, tras concluir sus estudios, se había incorporado como contable a la consultora Ernst & Young. El apoyo de su  jefe, Mark Hellmer, que le animó a dar el salto con la promesa de unas puertas abiertas, fue definitivo para su convencimiento. "Sabía que lo haría bien, pero tampoco hasta el punto de llegar a ser una dominadora mundial", comentó en The Wall Street Journal.

Jorgensen es una contable de medallas. Sus diez oros en las diez pruebas de las Series Mundiales en las que tomó parte la convierten en la máxima favorita para el oro olímpico en los Juegos de Río de Janeiro. En 2012 afrontó su primer año serio, con victoria en la World Cup de Banyoles, y en 2013 su primera temporada completa, con cuatro éxitos.  Desde que fuera tercera en Ciudad del Cabo, segunda cita de 2014, no ha bajado del primer cajón en Yokohama, Londres, Chicago, Hamburgo, Edmonton, Abu Dabi, Auckland, Gold Coast y, antes de Londres este domingo, Yokohama. Y su techo, no se atisba.