Rijkaard lo tiene claro. Ronaldinho jugará su octavo derbi desde que fichó por el Barcelona el próximo sábado en Montjuïc.

Tras borrarse del partido ante el Recreativo, el brasileño fue ´castigado´ por Rijkaard con el banquillo en Lyon. Esto hizo que se retrasara una semana el plan inicial (banquillo ante el Recre y reaparición en Lyon), con lo que lo propuesto tendrá lugar en el derbi. Es decir, reaparecerá ante el Espanyol.

Además, al holandés no le gustó la fragilidad y poca profundidad de su equipo por banda izquierda en el partido de Champions, con lo que prefiere un Barcelona con Ronaldinho a medio gas que sin él en el campo.

Según As, la decisión de Rijkaard es consensuada con el propio Ronaldinho y con los técnicos asistentes.

Sin embargo, es una decisión mal recibida por el entorno, compuesto por Johan Cruyff y sus satélites, que abarcan hasta altos mandos de la junta directiva, pasando por un variopinto ramillete de opinadores más o menos profesionales.

Henry no estará

El que no estará es el delantero Thierry Henry, al no recuperarse de las molestias en la parte izquierda de la zona lumbar que ya le impidieron actuar ante el Olympique de Lyon en la Liga de Campeones y tampoco jugó en el estadio del Valladolid, aunque por unas molestias en el tobillo.

El francés, que no ha podido entrenarse en toda la semana con el resto del equipo, continúa con sus molestias, que le afectan al glúteo izquierdo y será baja "mientras su sintomatología no mejore", según el parte médico ofrecido por el club azulgrana.

Tampoco jugará frente al Espanyol Sylvinho, debido a las molestias que arrastra en el tobillo de la pierna izquierda, mientras que Thuram y Oleguer se ejercitaron aparte en el Camp Nou y podrían quedarse fuera de la convocatoria para el derbi barcelonés. Lionel Messi tampoco completó el entrenamiento matinal, en el que sí participó con normalidad Samuel Eto'o, pero el argentino estará en el césped del Montjuïc el próximo sábado.