Real Madrid y Atlético dispondrán de un total de 17.000 entradas cada uno para ponerlas a disposición de los aficionados que quieran presenciar la final de la Champios 2014, que se disputará el 24 de mayo en el estadio Da Luz de Lisboa (65.000 espectadores).

El resto de entradas, unas 31.000, serán para la UEFA. El máximo organismo del fútbol europeo ya puso a la venta por Internet en marzo un cupo importante y unas 5.000 se podrán comprar en las taquillas el mismo día del partido. El resto, unas 24.000, irán destinadas a cumplir con los diferentes compromisos de la UEFA con sus patrocinadores.

Por su parte, el Real Madrid ya iniciado el proceso de solicitud de entradas para sus socios, que concluirá el 5 de mayo a las 20.00 horas. Las solicitudes se harán a través de la oficina de atención al socio y en caso de que el número de solicitudes es superior al de entradas disponibles se realizará un sorteo.

En el Atlético, aún no hay nada oficial sobre este tema, aunque es previsible que la entidad rojiblanca siga el mismo criterio que en anteriores finales europeas: tendrán preferencia los socios más antiguos que dispongan del abono total de la temporada.

Será una final histórica, ya que es la primera vez que dos equipos de una misma ciudad llegan a la final de la máxima competición continental de fútbol. Por ese motivo, la demanda que existe es brutal. Tanto es así, que ya está funcionando la reventa, la única manera de lograr una localidad fuera de los cauces institucionales.

La entradas de la UEFA están divididas en cuatro categorías de precios que oscilan entre los 390 y los 70 euros. Sin embargo, su valor en la reventa por Internet está por encima de los 1.000 euros.

Otro asunto que preocupa a los aficionados es la forma de viajar hasta Lisboa. Para los que piensan utilizar el avión o el tren, deben ser conscientes de que los precios para esas fechas se han elevado mucho debido a la fuerte demanda.

Renfe ya ha anunciado que pondrá a la venta 2.000 plazas extraordinarias en trenes especiales para viajar entre las capitales de España y Portugal.

Lo más asequible para los bolsillos es viajar en coche, ya que entre Madrid y Lisboa hay poco más de 600 kilómetros.

Pernoctar en la capital portuguesa también será complicado y caro. Más del 90% de las plazas hoteleras están ya reservadas y las que quedan libres tienen precios prohibitivos: una habitación doble en un hotel de dos estrellas puede alcanzar los 3.000 euros.