No es ningún secreto que Emerson no es feliz en el Real Madrid.

El jugador madridista admite que "juego para mí y para nuestros aficionados, para divertirlos y para divertirme, pero desde hace tiempo me hago siempre la misma pregunta: ¿vale realmente la pena?".

Emerson advierte que su paciencia tiene un límite y adelante que "aguantaré hasta final de temporada y después tengo que meditar".

El jugador lamenta que "el público no me perdona nada. Al primer pase fallado me masacran".

Según explica, “llegué al Madrid con la etiqueta de hombre de confianza de Capello y esto, probablemente, ha provocado mucho fastidio. Sobre todo desde que el entrenador ha caído en desgracia y la gente le critica".

El jugador quiere volver a Italia, donde aún tiene un buen cartel. El jugador no se muerde la lengua en la prensa italiana: "Echo de menos la Juventus, porque en Madrid me están masacrando".

Su salida a final de temporada está cantada: varios clubes italianos, como el Milan y Juventus, están interesados en él,

Este jueves Pedja Mijatovic, director deportivo del Real Madrid, se reúne con el representante del jugador brasileño para analizar su situación.

El pacto entre Fabio Capello y el propio Emerson para que éste no jugara en el Bernabéu ha precipitado esa reunión, según informa el diario Marca.

Capello contaba con Emerson para jugar este domingo contra el Getafe después de la sanciones de Guti y Diarra, pero una oportuna sobrecarga en el músculo tibial de su pierna izquierda le puede librar del suplicio de jugar en el Santiago Bernabéu.

A lo largo del día de hoy, Emerson se someterá a una resonancia para evaluar su lesión.