Llevan años jubilándole, pero Rubens Barrichello (BrawnGP) se resiste y no está dispuesto a aceptar que 2009 se convierta en su última oportunidad para hacerse con un título mundial en la Fórmula 1.

A sus casi 38 años, el veterano piloto reconoce que su carrera estuvo a punto de finalizar el pasado invierno con la desaparición del equipo Honda, pero que tras rescatarle Ross Brawn, sus ilusiones se han renovado: "Quién sabe", dice Barrichello a la publicación alemana Auto Motor und Sport , "tal vez me voy a otro equipo para dos o tres años".

"En mi vida siempre he pensado positivamente y estoy convencido de que esta actitud es la que me puso donde estoy", afirma y, a pesar de que Button ha ganado en tres ocasiones con el BGP001, él no se siente psicológicamente derrotado por los logros de su compañero: "Las carreras de motor no son como el tenis. No es como estar en el tercer set habiendo perdido dos a cero. Yo sé por estos últimos años que puedo rodar más rápido que Button".