El asesinato de un hincha y la posibilidad de que ese hecho provoque réplicas el próximo sábado han determinado que el partido entre Huracán y San Lorenzo no se dispute en el estadio del primero sino en 'La Bombonera' boquense, en la decimoséptima jornada del Apertura 2008 del fútbol argentino.

Rodrigo Silvera, hincha del Huracán, falleció el domingo como consecuencia de un choque entre grupos violentos de ambos equipos ocurrido a principios de mes, y el riesgo de nuevos enfrentamientos ha llevado a las autoridades nacionales a buscar un escenario neutral.

Los funcionarios decidieron además que el encuentro correspondiente al Clausura de 2009, torneo oficial del primer semestre, tampoco se dispute en el "Nueva Gasómetro" del San Lorenzo, al considerar el asunto como de extrema gravedad y peligrosidad.

Huracán y San Lorenzo son los equipos que representan a barrios vecinos de Buenos Aires, Parque de los Patricios y Boedo, con una rivalidad tradicional que, desde los tiempos de la organización del fútbol de su país entre las décadas de los años diez y veinte del siglo pasado, lo han convertido en un "clásico".

Ambos clubes cumplen en 2008 su centenario, coincidencia que no ha ocurrido con otros equipos que protagonizan "clásicos" importantes en el fútbol mundial.

A principios de año unos pocos simpatizantes lanzaron la idea de que Huracán y San Lorenzo disputaran la Copa Centenario, iniciativa que no tuvo eco en las directivas de ninguno de los dos clubes.

Odio entre los fanáticos

Se proponía un encuentro de confraternidad y que antes de él se homenajeara a futbolistas que vistieron las dos camisetas. El plan nació muerto y con la muerte de un hincha se ha saldado el odio entre los fanáticos en el año de la centuria compartida por ambos.

A falta de tres jornadas para la finalización del Apertura, el San Lorenzo necesita de una victoria ante su histórico rival para mantener las esperanzas de luchar por el título, debido a que comparte el segundo puesto con el modesto Tigre, a dos puntos del líder Boca Juniors.

También el domingo pasado murió por heridas de arma blanca un hincha del Colón de Santa Fe en el estadio del club, durante el partido de la Primera División ante el Godoy Cruz. Las víctimas fatales de la violencia en el fútbol argentino son 180 en los últimos 69 años.