El circuito brasileño de Interlagos convertirá este domingo a Fernando Alonso o a Sebastian Vettel en el tricampeón del mundo más joven de la historia de la Fórmula 1. El alemán lo tiene todo de cara, coche y puntos (13 más que el asturiano), pero Alonso está acostumbrado a navegar con temporal.

Y la borrasca que se cierne sobre el GP de Brasil puede ser, precisamente, su mejor aliado. La probabilidad de lluvia para el domingo es prácticamente del 100% y ayudaría a paliar las carencias del Ferrari. Alonso lo tiene claro: "Si la carrera se disputa en condiciones normales (seco), será muy difícil recortar 13 puntos, pero si ocurre algo especial, podemos ser campeones".

El asturiano, que se juega el Mundial por cuarta vez en la última carrera, se mostró tranquilo ante el reto: "No tengo nada que perder y mucho que ganar. La presión la tienen otros. Nuestro objetivo tiene que ser subir al podio y luego ya veremos lo que hace Sebastian". Pisar podio es condición sine qua non para Fernando, pero lo ha conseguido en 12 de las 19 carreras disputadas (63%).

El segundo requisito, que Vettel no mejore la quinta posición, parece más complicada y al alemán se le ve relajado. Incluso bromeó cuando le preguntaron por una probable carrera sobre mojado: "No pasa nada, no tenemos que preocuparnos porque me aseguraron que habrá neumáticos de lluvia para todos".

Alonso estrenará las últimas mejoras del curso en su Ferrari, entre ellas una corrección del nuevo difusor, que no funcionó en Austin, y algunas novedades en los alerones.

A favor de vettel

Coche. Su Red Bull es el monoplaza más fuerte de la parrilla, casi medio segundo por vuelta más rápido que el Ferrari de Alonso.

Liderato. Le basta con terminar cuarto en Brasil para ser campeón. Lo ha conseguido en 13 de las 19 carreras disputadas (68%).

Calificación. Es su punto fuerte y mañana hay menos posibilidades de lluvia. Si logra la pole será difícil alcanzarlo en carrera.

A favor de alonso

Fiabilidad. Red Bull ha sufrido tres fallos de motor este año y Brasil es un circuito duro para los propulsores. El Ferrari apenas ha fallado.

Lluvia. Alonso logró sus dos únicas poles sobre mojado y ganó bajo el diluvio de Malasia. Se espera agua en la carrera de Interlagos.

Presión. Alonso soporta la presión mejor que Vettel y apenas comete errores. El alemán ha fallado en situaciones complicadas.