A punto de estrellarse por una hipoglucemia severa

En la CA 241 en Santoña, Cantabria, un conductor no deja de hacer eses. Va una velocidad excesivamente lenta, a trompicones. Todo el mundo que se lo cruza cree que va tremendamente bebido. Una patrulla de la Guardia Civil, avisada por varios conductores, se lanza a neutralizar al conductor durante varios kilómetros sin éxito. Por fin lo consiguen en una rotonda y advierten de que se trata de un conductor diabético que ha sufrido una bajada de azúcar.