La noche del viernes se registraron nuevos desprendimientos, aunque de menor magnitud. 97 familias fueron desalojadas en Ondarroa, abandonando sus casas con lo puesto. Otras 84 familias llevan desalojadas desde el pasado martes. La mayoría están durmiendo en casa de familiares o amigos, pero también se ha habilitado el polideportivo de la ciudad.