Los violentos cruzan la línea roja

Las brutales protestas continuaron en Barcelona en la noche de este sábado, cuando se causaron graves desperfectos con cajeros quemados y nuevos saqueos en tiendas, entre otras cosas. Sin embargo, el incidente más grave se produjo cuando algunos manifestantes intentaron quemar un furgón de la Guardia Urbana en el que había un agente dentro con una bengala y con un líquido inflamable. La noche ha acabado con 14 detenidos y seis agentes de los Mossos d'Esquadra heridos leves.