Mosaic es un nuevo videojuego indie que transcurre en un futuro ultracapitalista y deshumanizado. Lo cuentan sus responsables, el estudio Krillbite, que se inspiraron en el cansancio y el exceso de horas de trabajo que supuso para ellos su anterior proyecto.

Mosaic es un juego "sobre el aislamiento urbano y el temor a convertirse en una pieza más de un inmenso engranaje que no podemos entender". Acaba de presentarse en España. A finales de 2019 salió su versión para PC y Steam, y ahora llega para PlayStation 4, Xbox One y Nintendo Switch.

La vida del protagonista de Mosaic, una persona que cumple con su rutina laboral en una megacorporación sin tener más propósito, cambia por completo cuando comienzan a suceder cosas extrañas.

El objetivo, explica el estudio noruego, es que los jugadores vean paralelismos con sus propias vidas. El videojuego, defienden sus creadores, les anima a romper con la rutina; a descrubir la ciudad; a aventurarse.

Según Krillbite, ese futuro distópico del videojuego, entre futurista y surrealista, se inspira en películas como Brasil, de Terry Gilliam; Metrópolis, de Fritz Lang; o PlayTime, de Jacques Tati.

Durante su presentación en Madrid, los responsables del estudio han explicado que para el desarrollo de su anterior título, Among the Sleep (un juego de terror que se lanzó en 2015), los desarrolladores tuvieron que hacer horas extra para cumplir los plazos de entrega.

Y eso les inspiró para crear Mosaic: "Nos sentimos atrapados en el desarrollo del juego anterior, después de muchas horas de trabajo", ha contado el director del videojuego, Adrian Husby.